El director general de Tráfico, Pere Navarro, ha anunciado este martes que está estudiando jurídicamente eliminar la obligación de bajarse a colocar los triángulos en autopistas este verano para evitar atropellos.
"Para este verano estamos estudiando a ver si podemos jurídicamente hacerlo", ha dicho Navarro, que recuerda que la alternativa a esta opción que evita salir del vehículo, la señal V16, no será obligatoria hasta el 1 de enero de 2026.
En este sentido, ha explicado que, de momento, es obligatorio colocar los triángulos salvo circunstancias excepcionales pero que se hace la interpretación de que se ha detectado que es un riesgo alto en las carreteras de alta capacidad bajar a colocar el triangulo.
"Con lo cual eximimos de la obligación de bajar a colocar el triángulo. Esto tiene una instrucción a todas las policías", ha señalado Navarro. Fuentes de la DGT, han señalado a Europa Press que se están perfilando los detalles de esta decisión, que se podría materializar en los próximos días.
Navarro, que ha impartido la conferencia 'Balance los últimos cuatro años en material de Seguridad Vial en España' celebrada en Fundación Mapfre, ha recordado que en 2022 un total de 42 personas fueron víctimas de siniestros viales por bajarse del vehículo. "Algo había que hacer. Bajarse y poner el triangulo a 50 metros es un riesgo y más en carreteras de alta velocidad, que hay mucho tráfico", ha afirmado.
Navarro también ha recordado que en Reino Unido y en Luxemburgo ya se exime de bajar del coche a colocar triángulos en autopistas y autovías porque consideran que es más peligroso bajar que no colocar nada.
También ha precisado que esta medida afectaría sólo a aquellos que no cuentan ya con la señal V16 para autopistas y autovías. "No hace falta que te bajes y te vayas 50 metros atrás para colocarlo", ha añadido.
1.746 FALLECIDOS EN LAS CARRETERAS EN 2022
Por otro lado, Navarro ha señalado que el balance constata que el año 2022 se ha cerrado con 1.746 personas fallecidas en siniestros de tráfico, es decir, con nueve fallecidos menos que en el año 2019 -antes de la pandemia-, lo que supone un descenso del 1% en un contexto de aumento de un 3% del número de desplazamientos en carretera (220.000 conductores más) y un 3,6% más en el parque de vehículos.
En este contexto, ha destacado que en las vías interurbanas, aumentaron los fallecidos un 3%, mientras que en las vías urbanas descendieron un 8% con respecto a 2019. Además, ha informado de que, pese a que el descenso también se ha producido en el número de usuarios vulnerables fallecidos (peatones, motoristas y ciclistas), "siguen representando la mitad de los fallecidos totales".
Concretamente, ha comentado que un total de 473 motoristas murieron en un accidente de tráfico, lo que supone que uno de cada cuatro fallecidos iban en moto, mientras que murieron 348 peatones, un 9% menos que en 2019. De ellos, según ha comentado, 134 peatones fueron atropellados en carretera, es decir, el 11% de los fallecidos. En cuanto a los ciclistas, ha explicado que murieron 81 personas, 60 en carretera y 21 en ciudad. "Por cada ciclista que muere en ciudad, mueren 3 en carretera", ha detallado.
En cualquier caso, ha señalado que España "sigue siendo un referente en Europa con 37 fallecidos por millón de habitantes, cuando la media en la Unión Europea es de 46".
MOVILIDAD SEGURA VS SEGURIDAD VIAL
El director de la DGT también ha señalado que la legislatura, "pese a los obstáculos vividos, ha sido fructífera" en lo que a Seguridad Vial se refiere. "No solo por las medidas adoptadas, sino también por el paso adelante que se ha dado en consolidar el término movilidad segura, un concepto más amplio y ambicioso que el de seguridad vial", ha asegurado.
Por su parte, el director de Prevención y Seguridad Vial de Fundación MAPFRE, Jesús Monclús, ha mostrado su preocupación por haber obtenido unas cifras de fallecidos en las carreteras similares a las de 2019. "Es una mala noticia cuando el objetivo es reducir en un 50% el número de fallecidos y heridos graves antes de 2030", ha añadido.
Monclús ha detallado que la evolución en países europeos en estos cuatro años ha sido "bastante desigual", con aumento de alrededor del 10% en el número de fallecidos en los países más seguros del mundo como Noruega o Países Bajos.
En este sentido, ha añadido que las máximas reducciones se han alcanzado en Lituania o Polonia, en torno al 35%. "Eran países con un claro margen de mejora al inicio del periodo. Quizás los mejores ejemplos en estos años (2019-2022) hayan sido Dinamarca y Bélgica, con reducciones en el número de fallecidos en el entorno del 20%", ha añadido.
Por último, la directora ejecutiva de la Asociación por la prevención de accidentes de tráfico y ONG de atención a víctimas de accidentes (AESLEME), Mar Cogollos, ha puesto el foco en la necesidad de mejorar la atención psicológica a las víctimas y a sus familiares, que se enfrentan a momentos dramáticos y traumáticos, tras un siniestro grave.
"No puede ser que en las urgencias hospitalarias no exista aún un psicólogo especialista en urgencias y emergencias, para tratar adecuadamente a las víctimas", ha afirmado.