El Consejo de Gobierno aprobó esta semana, como ya adelantó ayer DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, el reparto de un total de 240.000 euros entre los 349 agricultores que se habían acogido a las ayudas para financiar los seguros de sus viñedos, con lo que se garantiza la protección de 5.601 hectáreas. Se da la circunstancia de que periódicamente, el cultivo de la vid en Álava sufre diversos episodios de daños como consecuencia de la adversa climatología, con habituales heladas en los viñedos y frecuentes granizadas.
Esta circunstancia refuerza la necesidad de profundizar en el fomento de la contratación de seguros agrarios en viñedo, como instrumento que permita a las explotaciones que lo suscriben reducir su vulnerabilidad ante los riesgos climáticos al contribuir a hacer frente a las pérdidas económicas derivadas de estas adversidades.
Para ello, interviene la Diputación, facilitando esas ayudas para que los agricultores puedan contratar cualquier seguro dentro de las líneas y módulos de seguros recogidos en el Plan Nacional de Seguros Agrarios Combinados vigente el año 2022 y de aplicación en parcelas ubicadas en Álava para la uva de vinificación.
En la normativa solo se establecen dos topes. Por un lado que las ayudas concedidas por Diputación sumadas a las de Enesa no pueden superar el 65% del coste neto del seguro. Y, por otra, que no se apoyará cuando el coste sea inferior a 100 euros o superior a los 2.000, salvo que la beneficiaria sea una asociación de productores que haya suscrito póliza de seguro colectivo, en cuyo caso no será de aplicación el límite inferior anteriormente indicado y los 2.000 euros de ayuda máxima será multiplicado por cada uno de los socios acogidos al seguro que de forma individual alcancen este importe de ayuda.
Características del seguro
En la normativa se detallan los riesgos cubiertos por los seguros, citando específicamente el pedrisco y la helada, la marchitez fisiológica, los riesgos excepcionales y otras adversidades climáticas. Se señalan las características técnicas que deben tener las instalaciones y se fijan los precios medios para poder proceder en las indemnizaciones. En el caso de la Denominación de Origen Rioja se señalan 14 variedades de viñedo, de las que ocho son denominadas como preferentes (tempranillo, viura, chardonnay, garnacha, garnacha blanca, graciano, maturana tinta y malvasía riojana) y el resto como autorizadas (turruntés, maturana blanca, mazuelo, sauvignon blanco, tempranillo blanco y verdejo). Para cada una de ellas se fija un precio máximo y mínimo, con cantidades que oscilan por cada cien kilos entre los 35 y los 73 euros.
En el caso de las variedades que se cultivan en el País Vasco, fuera de las amparadas por la Denominación de Origen, aparecen 28, cuya valoración, por cada cien kilos, van desde los ocho euros para dos variedades de moscatel a las 50 del cabernet sauvignon.
En canto a los rendimientos admitidos por hectárea, la orden diferencia las variedades por zonas. Así se detallan los Valles Alaveses, Llanada Alavesa y Montaña Alavesa donde se fijan como rendimientos de referencia 6.100 kilos de uvas blancas tanto en regadío como en secano, y 5.500 kilos para las tintas en ambas situaciones. Otra cosa es Rioja Alavesa, donde el rendimiento por hectárea de blancas se fija en 8.050 en regadío y 7.900 kilos en secano. Para las tintas se reducen a 6.900 y 6.750 respectivamente.
En la orden también se reflejan esos rendimientos para las zonas del txakoli, a las que fija dos áreas: la cantábrica y las Estribaciones del Gorbea, con valoraciones idénticas a las zonas alavesas exceptuando Rioja Alavesa.
Quejas por los precios
La propuesta de Agroseguro a comienzos de la primavera del año pasado de elevar las cuotas de los seguros de uva para vinificación provocó la queja de los agricultores y el que el diputado de Agricultura tuviera que comparecer en comisión en las Juntas Generales de Álava. Eduardo Aguinaco constató que Agroseguro tenía intención de subir el precio del seguro entre un 15% y un 20% para la siguiente campaña, alegando la alta siniestralidad de los últimos años. En concreto, para Rioja Alavesa, los incrementos propuestos alcanzan un 10% en piedra y un 30% en hielo.
Ante ese anuncio, el Departamento foral de Agricultura se reunió con la delegada y técnicas de la zona norte de Agroseguro para transmitirlas el malestar por los efectos de esta medida, teniendo en cuenta las dificultades que ha sufrido el sector productor en los dos últimos años, con precios bajos de la uva y un importante incremento de los costes de producción. Argumentó también que en los últimos años se ha alcanzado en Álava un altísimo nivel de contratación, por encima del 70% de la superficie de la comarca.