Clima y suelos son muy favorables en el territorio histórico para el desarrollo de numerosos cultivos frutales. Y ante la oportunidad que ofrece esta potencialidad, desde la Diputación Foral de Álava se está trabajando en el diseño e impulso de estrategias con el objetivo de fomentar el cultivo frutal para nuestro territorio en los próximos años.
En este sentido, el Departamento de Agricultura de la Diputación Foral de Álava publicará el próximo lunes, 31 de mayo, en el BOTHA el decreto de ayudas a la implantación de frutales, abriéndose el plazo de solicitudes desde el 1 al 30 de junio, ambos inclusive.
Las subvenciones previstas están destinadas a los titulares de explotaciones agrarias alavesas en activo y con una edad comprendida entre los 18 y los 65 años, pudiéndose acoger a esta línea de ayudas tanto agricultores que cumplan los requisitos para ser considerados agricultores a título principal (ATP), como los que no cumplan con esta condición.
Será subvencionable el establecimiento de nuevas plantaciones regulares de árboles frutales o ampliación de otras existentes en una superficie mínima de 5.000 metros, así como nuevas plantaciones de pequeños frutos o ampliación de otras existentes en una superficie mínima de 2.000 metros.
Los gastos subvencionables serán los que afectan al establecimiento de las plantaciones como son las labores preparatorias, compra de planta, plantación, cierres perimetrales o sistema de riego, entre otras. También serán subvencionables los gastos de asesoramiento técnico en fruticultura.
El importe de la ayuda será el 40 % de la inversión subvencionable, porcentaje que se podrá incrementar un 10% más, tanto para jóvenes agricultores o agricultoras, como para las plantaciones que se ubiquen en zonas con limitaciones naturales u otras limitaciones específicas, lo que supone prácticamente la totalidad del territorio alavés. Es importante resaltar que esta línea de ayudas se ajusta al singular ciclo de cultivo de los árboles frutales, siendo admitidos como gastos subvencionables los realizados desde el 1 de enero de 2021, hasta el 30 de diciembre del 2022, por lo que hay dos años de plazo para hacer las inversiones previstas.
Otras iniciativas En esta línea de promoción de los frutales, la Unión Agroganadera de Álava (UAGA) está liderando un proyecto de innovación para el análisis del cultivo del nogal y otros frutos de cáscara en Álava; y, de hecho, la central ha puesto en marcha el proyecto de cooperación UTG Nogal que lidera en el desarrollo de un plan piloto de gestión técnica para la implantación de frutales de cáscara en Euskadi. En este proyecto participan junto con la UAGA otros agentes y profesionales del sector: Neiker, con todo su potencial de I+D; el Grupo UTEGA, de Fuentespina (Burgos). Este grupo nace de la fusión en 2006 de las empresas Uriarte Iturrate S.L. y Frutos secos de la Vega S.L.; también participan Noemi Salazar, consultora especializada en el sector agrario, y Pere Pujol, un conocido profesional catalán, experto asesor en fruticultura de cáscara.
Las pruebas piloto del proyecto se llevan a cabo en la zona de Valles Alaveses, en terrenos del municipio de Zambrana, para comprobar la viabilidad de los frutales de cáscara como diversificación agrícola, unida a la comercialización colectiva del producto. Un proyecto paralelo analizará el uso de las cáscaras como biomasa, para su comercialización.
Ayudas
¿Cuándo? El Departamento de Agricultura de la Diputación Foral de Álava publicará el próximo lunes, 31 de mayo, en el BOTHA el decreto de ayudas a la implantación de frutales, abriéndose el plazo de solicitudes desde el 1 al 30 de junio, ambos inclusive.
¿Quiénes? Están destinadas a los titulares de explotaciones agrarias del territorio histórico en activo y con una edad comprendida entre los 18 y los 65 años, pudiéndose acoger a esta línea de ayudas tanto agricultores que cumplan los requisitos para ser considerados Agricultor a Título Principal (ATP), como los que no cumplan con esta condición.
¿Cuánto? El importe de la ayuda será el 40 % de la inversión subvencionable, un porcentaje que se podrá incrementar un 10% más, tanto para jóvenes agricultores o agricultoras, como para las plantaciones que se ubiquen en zonas con limitaciones naturales u otras limitaciones específicas, lo que supone prácticamente la totalidad del territorio alavés.