La Diputación Foral de Bizkaia decidirá si participa o no de la "financiación de la entrada del TAV en Bilbao," cuando esté definido tanto el proyecto como su presupuesto". En el pleno de las Juntas celebrado hoy en Gernika, el Diputado General de Bizkaia, Unai Rementeria, ha recordado en todo caso, que la institución foral "no tiene competencias ferroviarias ni urbanísticas".
Sí que la tiene en cambio, sobre otro proyecto estratégico como es, la variante de Rekalde. En este mismo pleno de control, el diputado de Infraestructuras, Imanol Pradales, ha confirmado que la Diputación Foral de Bizkaia ha iniciado los estudios previos necesarios para construir esta variante de Rekalde, paso imprescindible para poder derribar el viaducto de la A-8 que atraviesa el barrio: "el análisis de la información geotécnica, medioambiental y urbanística se prolongará durante seis meses". Así, que de cumplirse los plazos previstos, el viaducto de Rekalde podría ser historia para los vecinos en verano de 2032.