Cultura

La ermita de Santa Elena en Irun abre sus puertas al público para explorar su yacimiento arqueológico

Este domingo, el Ayuntamiento de Irun y el Museo Romano Oiasso invitan a los ciudadanos a descubrir la necrópolis romana de Oiasso
Imagen de la Ermita de Santa Elena | Foto: Oiasso Museoa

Este domingo, la ermita de Santa Elena en Irun ofrecerá una jornada de puertas abiertas, organizada por el Ayuntamiento de Irun y el Museo Romano Oiasso. Esta actividad permitirá al público acceder de manera gratuita a uno de los yacimientos arqueológicos más relevantes de la ciudad.

Los asistentes podrán conocer de cerca la necrópolis de la antigua ciudad romana de Oiasso a través de la exposición instalada en el interior de la ermita. Además, tendrán la oportunidad de visualizar una reconstrucción en 3D de la necrópolis y observar los restos arqueológicos desde la pasarela que conecta el altar con la entrada principal.

La jornada, celebrada con motivo del Día de Santa Elena o Xantalen, es una iniciativa impulsada por la Asociación de Vecinos Alde Zaharra-San Juan, que desde hace años organiza esta actividad en el contexto de las Fiestas de Xantalen. El programa incluye también otros eventos en la ermita, como la tradicional misa y la entrega de los Premios Txapelaundi, que tendrán lugar el sábado.

Durante todo el año, los domingos a las 11:00 horas en castellano y a las 12:30 horas en euskera, el Museo Oiasso ofrece visitas guiadas dentro de la ermita, en el marco del Tour Irun Romano (TIR). Este itinerario está disponible de forma gratuita en dispositivos móviles, permitiendo a los visitantes profundizar en la historia del lugar.

La ermita de Santa Elena es un espacio donde los ritos religiosos han perdurado por más de 2.000 años. Originalmente fue una necrópolis que albergaba los cultos funerarios de los habitantes de Oiasso. En el siglo X, se construyó una pequeña iglesia sobre uno de los antiguos edificios paganos, que fue sustituida en el siglo XIV por un templo cristiano que alcanzó su tamaño actual en el siglo XVI.

Dedicada a Santa Elena, madre del emperador Constantino, quien en el año 313 legalizó el cristianismo en el Imperio Romano, la ermita celebra a esta figura que fue canonizada por descubrir la cruz en la que murió Jesús de Nazaret.

Reconocida como un Bien Cultural de Protección Especial del Patrimonio Cultural Vasco, la ermita de Santa Elena forma parte del conjunto monumental del Camino de Santiago a su paso por la Comunidad Autónoma del País Vasco.

16/08/2024