Agentes de la comisaría de Donostia de la Ertzaintza detuvieron este jueves por la tarde en el barrio de Gros al presunto autor del asesinato de una mujer en Murchante. Pedro María R. J ha sido localizado por agentes de paisano de la Ertzaintza en una peluquería de la calle Pasaia del barrio donostiarra, donde al parecer el fugado trataba de cambiar su aspecto físico.
Este hombre de 41 años, con un largo historial delictivo a sus espaldas, trató de burlar durante todo el día el cerco policial, que se fue estrechando conforme han pasado las horas hasta que finalmente ha sido detenido por patrullas de protección ciudadana de Ertzaintza en el barrio de Gros.
Según han indicado fuentes de la investigación, el presunto asesino, sobre quien pesaba una orden de detención europea, había tomado un taxi a primera hora de la mañana después de haber pasado la noche alojado en una pensión del barrio donostiarra de Amara. El presunto homicida se ha desplazado posteriormente al barrio de Igara.
La Ertzaintza ha seguido durante todo el día muy de cerca sus pasos, tras recabar el testimonio del chófer que le ha trasladado, "visiblemente nervioso", a un varón cuya descripción coincidía plenamente con la de Pedro María R. J. El sospechoso se ha bajado posteriormente del vehículo en dirección a un concesionario de Volkswagen cercano.
Según fuentes de la investigación, este hombre, de quien se sospecha que viajaba con una importante suma de dinero, ha estado mirando el escaparate de este negocio con la intención, al parecer, de adquirir un vehículo de segunda mano. Era primera hora de la mañana y al comprobar que no abría el negocio ha abandonado a pie el lugar.
En la cabeza de este hombre solo cabía la huída. El presunto asesino, cuñado de la víctima mortal, sabía que la policía estaba siguiendo sus pasos y tras un intento infructuoso por hacerse con un vehículo en el entorno del concesionario se ha desplazado posteriormente hasta el barrio de Lugaritz, donde ha robado un vehículo sin rotular de la Ertzaintza. En concreto, un Seat Leon de color verde con las llaves puestas que en esos momentos estaba siendo reparado en un taller.
El estrecho cerco policial ha dado finalmente con él en una peluquería del barrio de Gros.