Tras llevar a cabo una treintena de pruebas piloto con las patrullas de Bilbao, Gasteiz e Irun, la Ertzaintza comenzará a llevar a partir del mes que viene unos dispositivos de grabación en su uniforme que permitirán registrar sus actuaciones. El anuncio lo realizó este miércoles el consejero de Seguridad, Bingen Zupiria, en una entrevista concedida a ETB-1, donde confirmó la puesta en marcha inmediata de una medida que ya estaba prevista para el año pasado y para la que, de hecho, se había consignado la llegada de unas 1.400 cámaras. Zupiria confirmó que el protocolo se pondrá en marcha “a partir del mes que viene”, en noviembre, y que él mismo ha visitado ya varias comisarías y ha comprobado que está todo dispuesto para poder descargar las imágenes y asegurar un correcto funcionamiento.
Cuando se le preguntó si los agentes se han tomado bien la medida, puso en valor que lo que debe esperarse “más transparencia”, porque “será un recurso más” para conocer cómo se ha producido un hecho delictivo o una actuación policial, para tomar decisiones desde el ámbito policial y judicial; pero añadió que también puede dar mayor “seguridad” a los propios agentes, porque sus actuaciones quedarán grabadas y registradas. Estas grabaciones permitirán esclarecer si una actuación es proporcional o no, lo que da mayores garantías a la ciudadanía, pero también a un agente si recibe una acusación infundada.
De las declaraciones que se han realizado hasta la fecha y desde la anterior legislatura con el entonces consejero Josu Erkoreka, se desprende que este será un sistema con cierto grado de sofisticación, ya que se tiene que adaptar al vestuario de la Ertzaintza, hay que sujetar bien el dispositivo para que no se caiga, y se debe garantizar la descarga automática de las imágenes y adaptar las comisarías. La mayor parte de los dispositivos se van a destinar a la Unidad de la Brigada Móvil, que se encarga de vigilar el orden público; pero también a las patrullas de protección ciudadana de las tres capitales vascas y a las tres unidades territoriales de tráfico. En su momento se calculó que el importe ascendía a tres millones de euros, y se compraron 1.387 cámaras.
8.000 agentes
Zupiria también apostó por acercarse lo máximo posible al número ideal de agentes en la plantilla de la Ertzaintza, que de momento no alcanza la cifra de los 8.000. Sobre la controversia política que ha desatado en el Estado la reforma legal para descontar las penas cumplidas en el Estado francés, Zupiria invitó al PP a aclarar públicamente si lo que quiere es que continúe la excepcionalidad aunque ETA ya no exista.