Abierta la estación provisional de Renfe en Atotxa desde las 12.30 horas

La estación provisional de Renfe en Atotxa se ha puesto en funcionamiento a las 12.30 horas de este mediodía, tras varias horas cerrada y sin servicio ferroviario. Fuentes de Renfe ha explicado que se puede subir y descender a los trenes en la estación principal de Donostia que, desde esta mañana, tiene su acceso por el lado de Egia, mientras que el otro ha quedado anulado.

Mumerosos viajeros que se acercaron esta mañana a la nueva estación provisional de Atotxa se han quedado con un palmo de narices ya que la parada estaba cerrada a cal y canto. A pesar de que hace una semana, responsables políticos de distintas instituciones se dieron cita en el lugar para anunciar que la estación se abriría esta mañana, la realidad es que no se ha puesto en funcionamiento, pero tampoco la parada habitual, con acceso desde el Paseo de Francia, ha funcionado. De hecho, el tráfico ferroviarios ha estado interrumpido porque las obras no estaban del todo acabadas y otras causas en las obras de las vías fuera de Donostia.

El malestar de los viajeros que se han encontrado con las puertas cerradas desde primera hora de la mañana en la entrada al vestíbulo de la estación ha sido patente. Algunos han recibido permiso para acceder a los servicios. Los informadores también se han encontrado con problemas y, tras autorizárseles el acceso al vestíbulo, poco después de las 11.30 han sido conminados a abandonar el recinto.

La gerencia de Renfe de Cercanías Euskadi ha manifestado que la previsión es abrir la nueva estación provisional esta misma mañana.

Hace una semana, el espacio desde el que se accederá los dos andenes de la estación provisional estaba terminado, aunque faltaban las máquinas para comprar billetes, los tornos así como los comercios que se deben trasladar desde el edificio del paseo de Francia. La vieja estación será ahora objeto de una remodelación total y derribos interiores para modificarla, manteniendo sus fachadas. Además, se le añadirán dos plantas más.

Aunque la estación de Renfe es propiedad del Estado, las obras relacionadas con el TAV, incluida las de la parada donostiarras, han sido encomendadas a ETS.