El pleno del Parlamento Europeo dio este jueves su respaldo a la nueva ley de datos comunitaria, sobre la que los eurodiputados y los Estados miembros habían llegado a un acuerdo preliminar y que permitirá impulsar la innovación al eliminar las barreras del acceso a la información.
La nueva legislación establece reglas para compartir datos generados mediante el uso de productos conectados o servicios asociados, como el internet de las cosas o la maquinaria industrial, y permitirá a los usuarios acceder a los datos que ellos mismos generan, explicó en un comunicado la Eurocámara.
Así, contribuirá a desarrollar nuevos servicios, especialmente en el ámbito de la inteligencia artificial, en los que hacen falta grandes cantidades de datos para el entrenamiento de los algoritmos.
Tiene como objetivo asimismo abaratar el servicio posventa y las reparaciones de los dispositivos conectados y, en circunstancias excepcionales o emergencias, como inundaciones e incendios, los organismos públicos podrán acceder y utilizar datos del sector privado.
Los eurodiputados incluyeron en la ley una definición clara de secretos comerciales, así como de los titulares de los mismos, para evitar transferencias de datos injustificadas y filtraciones a países con estándares de protección de datos inferiores.
También quieren evitar que los competidores en un sector determinado sean capaces de acceder a datos para efectuar ingeniería inversa sobre servicios o dispositivos de sus rivales.
La nueva ley facilitará el cambio entre proveedores de servicios en la nube e introducirá garantías frente a posibles transferencias ilegales internacionales de datos por parte de estas compañías.
Los eurodiputados garantizaron que los clientes de servicios en la nube tendrán capacidad para negociar sus contratos y evitar que queden bloqueados con un proveedor en concreto.
El texto, que fue aprobado en el pleno con 481 votos a favor, 31 en contra y 71 abstenciones, tendrá que ser a continuación respaldado formalmente por el Consejo de la UE (los países) antes de que pueda entrar en vigor tras su publicación en el Diario Oficial comunitario.
El volumen de datos generados por las personas y las máquinas está aumentando exponencialmente, y se ha convertido en un elemento clave para la innovación empresarial y para los poderes públicos.
Según cálculos de la Comisión Europea, en la actualidad el 80% de los datos industriales no se utiliza nunca.