22 años después de la creación de la Euroliga, no cabe duda de que el torneo ha cumplido con la mayoría de objetivos que se marcó en el año 2000. Aunque le costó arrancar y generó dudas y disidencias cuando se presentó el proyecto, el torneo ha ido ganando adeptos hasta ser reconocido como la segunda liga de baloncesto más importante del mundo, solo por detrás de la todopoderosa NBA. El formato cerrado con invitaciones de la Euroliga ha conseguido concentrar la atención de los aficionados europeos y, por lo tanto, también de las televisiones, inversores y patrocinadores, logrando así unos ingresos que, si bien todavía son considerados escasos por algunos de los clubes, superan con creces los que se pueden obtener en el resto de competiciones.
De esta manera, la brecha entre los equipos que año tras año toman parte en la Euroliga respecto a sus rivales de las ligas domésticas ha crecido progresivamente hasta el punto en el que los conjuntos del máximo torneo continental dominan con puño de hierro sus respectivas ligas. Y un claro ejemplo de ello ha sido la temporada 2021-22, en la que todos los finalistas de las siete principales competiciones europeas son clubes que han participado esta campaña en la Euroliga.
En la ACB, sobre el papel el campeonato más competitivo e igualado de los siete, hace años que el Real Madrid y el Barcelona son los grandes dominadores, tanto por su condición de equipos de la Euroliga como por los desorbitados presupuestos que manejan. Este curso se han medido en la final por octava vez en los últimos 12 años, con triunfo para los blancos por 1-3, y entre los dos suman 10 de los últimos 12 títulos en disputa. Los dos restantes se los repartieron Baskonia y Valencia Basket, precisamente los otros dos equipos de la Liga Endesa que participarán en la Euroliga 2022-23. El Bilbao Basket, en 2011, fue el último conjunto ajeno al máximo torneo continental que logró colarse en una final de la ACB.
CAMBIOS EN LA BUNDESLIGA
El de la ACB no es un caso aislado, ya que en Italia, Grecia, Alemania, Turquía, Francia y Rusia está sucediendo lo mismo. El caso de Alemania es quizá uno de los más destacables, ya que, desde la entrada del Bayern de Múnich y el Alba Berlín en la Euroliga debido a su potencial mercado, estos dos clubes se han convertido en los principales dominadores de la Bundesliga, destronando al Brose Bamberg, que ha pasado de ganar siete entorchados entre 2010 y 2017 a no haber vuelto a alcanzar una final desde su último título. Las dos últimas finales han tenido los mismos protagonistas y el mismo resultado, con el Alba Berlín superando por 3-1 al Bayern.
Más conocido es el caso del Olympiacos y el Panathinaikos, los dos principales equipos de Grecia y protagonistas de una rivalidad histórica. Este año, con el regreso del Olympiacos a la máxima categoría tras dos años en Segunda División por sanción, han sido los del Pireo los que se han impuesto por 3-0 al Panathinaikos. El AEK fue el último club distinto a estos dos en ganar en torneo, en el curso 2001-2002.
Algo similar sucede en la liga turca, en la que Fenerbahce y Anadolu Efes, los dos equipos más laureados del torneo, han disputado las tres últimas finales. En esta ocasión, el Efes, pese a haberse proclamado campeón de la Euroliga, cayó por 3-1 frente a un Fenerbahce que, por otro lado, llegaba con menor carga de partidos al no haberse clasificado para el play off del torneo continental. En el caso de la Serie A italiana, que cuenta con un formato diferente al disputarse la final al mejor de siete partidos, fue el Armani Milan de Shavon Shields el que se impuso por 2-4 a la Virtus Bologna de Scariolo y Shengelia, que, aunque este curso no ha competido en la Euroliga, sí estará presente en la próxima edición por su condición de campeón de la Eurocup.
EL ASVEL, EL ÚLTIMO CAMPEÓN
La última liga doméstica en llegar a su fin ha sido la LNB francesa, que terminó el pasado sábado con un triunfo agónico del Asvel sobre el AS Mónaco en el quinto y decisivo partido. El duelo entre los dos conjuntos de la LNB que participan en la Euroliga se resolvió en la prórroga, con protagonismo para Elie Okobo, que se fue a los 20 puntos, 9 asistecias y 7 rebotes. Curiosamente, el portal Eurohoops publicó tras el encuentro que el base francés se pasará al Mónaco el próximo curso, donde cobrará cerca de un millón de euros por temporada.
Por último, cabe añadir que aunque los clubes rusos fueron descalificados de la Euroliga debido al conflicto bélico con Ucrania y tampoco participarán en la campaña 2022-23, dos de los que el pasado curso jugaron el máximo torneo continental fueron los finalistas de la VTB, con triunfo en este caso para el Zenit de San Petersburgo de Xavi Pascual sobre el CSKA por 3-1. La Euroliga, para bien o para mal, marca la diferencia.