La familia de Mikel Zabalza, reconocido como víctima de violencia por motivación política tras aparecer muerto hace 37 años semanas después de su detención por la Guardia Civil, ha considerado "un jarro de agua fría y una ofensa" el nombramiento como teniente general de la Benemérita de uno de los guardias implicados en aquellos hechos.
Ha sido en una comparecencia pública en Orbaizeta, localidad navarra de la que era oriundo Zabalza, cuya hermana Idoia, acompañada de otros familiares y de miembros de la plataforma Mikel Zabalza Gogoan y la Red de Torturados, ha recordado la "pelea" que todos ellos llevan desde hace 37 años por esclarecer los hechos, convencidos de que su hermano "murió en el mismo cuartel a causa de las torturas que le infligieron".
Tras apreciar el "gran respaldo social" percibido en este tiempo, ha valorado gestos y decisiones recientes, como la declaración institucional aprobada hace dos años en el Parlamento foral, y después en los ayuntamientos de Pamplona y Donostia, que exigían la investigación de los hechos tras salir a la luz unos audios que implicaban a la guardia Civil.
Además, el año pasado el Gobierno vasco reconoció a Mikel Zabalza la condición de víctima de violencia por motivación política.
Para la familia, esas declaraciones suponían "exigir la reactivación de todas las vías para el total esclarecimiento de los hechos y, en su caso, el reconocimiento y la asunción de responsabilidades por parte del Estado", convencidos los allegados de Zabalza de que "existía un gran consenso en la búsqueda de la verdad, la justicia y la reparación".
Expuesta la situación, Idoia Zabalza ha asegurado que ahora el nombramiento de uno de los agentes que se vinculan con los hechos, Arturo Espejo, como teniente general de la Guardia Civil es "un jarro de agua fría, una ofensa, que borra todo hilo de esperanza y nos deja bien claro que estamos exactamente en el mismo punto en el que estábamos hace 37 años, ante un muro que no dejarán derribar".
"Una vez más el gobierno ha preferido asesorarse, confiar, premiar y dar poder a personas relacionadas con los episodios más oscuros del Estado en vez de alinearse con los principios de las Naciones Unidas sobre las víctimas. Ha preferido elegir tortura en vez de verdad y justicia", ha lamentado.
Por su parte, desde la Red de Personas Torturadas de Navarra han mostrado su rechazo, "indefensión y repugnancia", a la actitud del Gobierno español, pues "no es ético reconocer y reparar por un lado, mientras se asciende y condecora por el otro".
Sobre este asunto, el senador autonómico Koldo Martínez (Geroa Bai) ha avanzado que el martes preguntará en la sesión de control al Gobierno por el ascenso "al mayor grado del generalato" de Espejo, "uno de los dos tenientes que avalaron la versión de la fuga y posterior ahogamiento en el Bidasoa de Mikel Zabalza, detenido y trasladado al cuartel de Intxaurrondo sin tener relación alguna con ETA, como quedó luego demostrado".