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La Fiscalía ha abierto diligencias de investigación al Arzobispado de Toledo por terapias de conversión a personas homosexuales, tras una denuncia presentada por la Asociación contra las Terapias de Conversión, según han confirmado a EFE fuentes fiscales.
Al respecto se ha pronunciado también este jueves la consejera de Igualdad de Castilla-La Mancha, Sara Simón, que ha afirmado que las terapias de conversión de personas LGTBI no tienen "encaje legal ni encaje moral", y ha asegurado que el Gobierno regional estará muy pendientes de las investigaciones de la Fiscalía por si "tiene que actuar".
Investigaciones
En declaraciones a los medios en Azuqueca de Henares (Guadalajara), Simón ha reafirmado el compromiso del Gobierno regional con las personas LGTBI y ha apuntado que han estado investigando el caso: "estuvimos haciendo las averiguaciones oportunas y vamos a estar ahora también muy pendientes de las investigaciones que haga la propia Fiscalía".
Ha aseverado que "si hay algún motivo para que el Gobierno de Castilla-La Mancha tenga que actuar, desde luego que lo hará sin ningún tipo de duda".
El lunes día 20 el Obispado de Cuenca anunció que se suspendía una charla de la organización 'Courage International' que estaba prevista en una parroquia de la capital conquense.
Conocimiento de prácticas
La asociación que ha denunciado las terapias de conversión para personas LGTBI ofrecidas en el Arzobispado de Toledo asegura que informó a la Junta de Castilla-La Mancha de estas prácticas en diciembre de 2022.
"La Junta conocía desde hace dos años que esto estaba pasando y dio carpetazo y lo metió en un cajón", ha aseverado Saúl Castro, abogado y presidente de la Asociación Española contra las Terapias de Conversión, que en declaraciones a EFE este jueves ha explicado que interpuso una denuncia ante la Consejería de Igualdad castellanomanchega contra la Archidiócesis de Toledo y el actual obispo, Francisco Cerro.
Según el relato del abogado, la consejería de Igualdad le trasladó que no estaba aplicando el régimen sancionador de la ley LGTBI castellanomanchega. "Nos dijeron que por decisión interna no se iba a tramitar ninguna denuncia y que no se iba a abrir ningún expediente sancionador", ha resaltado Castro, quien ha denunciado la "hipocresía" de la Junta, que, en sus palabras, "tiene competencias para investigar estos hechos y ha optado por ignorar esta forma de violencia".
Las terapias de conversión celebradas en la Archidiócesis de Toledo son ofrecidas por la organización estadounidense Courage International, que a día de hoy cuenta con al menos cuatro sedes en el Estado: Toledo, Alcalá de Henares, Getafe y Las Palmas de Gran Canaria.
"Grupos de acompañamiento"
La denuncia a la que ha tenido acceso EFE concreta que la sede del apostolado de Courage International se abrió en la Archidiócesis de Toledo en 2019. Lo que ofrece Courage International, apunta Castro, son "grupos de acompañamiento" que se reúnen periódicamente "para acompañar en la castidad a personas homosexuales que son religiosas".
"La tesis que mantiene es que la homosexualidad viene a ser una adicción y plantean un camino de cinco metas, que es una adaptación de los 12 pasos de alcohólicos anónimos, para conseguir el deshabituamiento de las personas homosexuales igual que se hace con los grupos de apoyo de alcohólicos", subraya.
Las cinco metas, detalla la denuncia, son la castidad, la oración y dedicación (ir a misa, leer la Biblia, etc), la hermandad, el apoyo, y el buen ejemplo y los testimonios.
"También ofrecen acompañamiento y asesoramiento a familiares y amigos de personas homosexuales", añade Castro, quien resalta que la organización cuenta con un manual donde, por ejemplo, se insta a que si el acompañamiento a través de las sesiones no es suficiente para una persona, se debe remitir a ésta a psicólogos que tengan una visión de la homosexualidad similar a la de Courage International.
El abogado opina que estas terapias incumplen el artículo 510 2A del Código Penal, que sanciona a aquellos que lesionen la dignidad de las personas mediante acciones que entrañen humillación, menosprecio o descrédito por razones como la orientación o la identidad sexual.
"Opinamos que se menosprecia su sexualidad como una sexualidad válida para vivir conforme a las enseñanzas de la Iglesia, pues no la consideran natural o normal, recomendando la castidad", asevera.