La Fiscalía no se plantea recurrir ante la Audiencia Nacional el rechazo del juez a volver a investigar a la exsecretaria general del PP María Dolores de Cospedal por la presunta trama parapolicial de espionaje al extesorero Luis Bárcenas para conseguir documentos que comprometían a la formación.
Los fiscales del caso recelan de que el recurso de apelación al auto que dictó hace unos días el juez Manuel García Castellón tenga posibilidades de prosperar, de modo que en principio han declinado recurrir la decisión, según ha adelantado la Cadena Ser y han confirmado a Efe fuentes fiscales.
Eso no quiere decir que la Fiscalía Anticorrupción no pueda volver a reiterar su postura al informar sobre otros recursos, como el que ya ha presentado Podemos, que ha reclamado a la Sala de lo Penal que vuelva a imputar a Cospedal; a su marido, el empresario Ignacio López del Hierro; y a su antiguo jefe de gabinete, José Luis Ortiz.
Con la negativa del juez a reabrir el caso Kitchen o formar una pieza separada para imputar a quien fue número dos del PP se cerró también la puerta a investigar la "conexión política" de la operación Kitchen "ajena al Ministerio del Interior", en palabras de la propia Fiscalía.
Anticorrupción quería investigar si la planificación de esta operación por parte de la antigua cúpula policial y de los máximos responsables de Interior -procesados en esta causa- "habría sido alentada o tutelada también desde la cúpula del Partido Popular, por entonces en el Gobierno de la nación".
Sin embargo, el juez Manuel García Castellón -que investiga estos hechos dentro del caso Villarejo, abierto en torno a los negocios del excomisario- cerró la causa dejando fuera a la exsecretaria general del PP al considerar que no había indicios suficientes de delito contra ella. Una decisión que ratificó hace meses la sección tercera de la Sala de lo Penal.
La aparición en prensa de unos audios que registraban conversaciones entre José Manuel Villarejo y Cospedal, así como entre el primero y el ex secretario de Estado de Seguridad Francisco Martínez -procesado en la causa- motivaron a que las acusaciones solicitasen la reapertura de la investigación y la imputación de quien también fue ministra de Defensa.
Aunque la Fiscalía creía que la vía era abrir una pieza separada, sí que consideró que la relevancia de estos audios era "indudable" y justificaba que Cospedal volviese a ser investigada en la causa, dado que estas grabaciones contradecían lo que ella misma declaró ante el juez.
Dichos audios, según los fiscales, reflejaban que la "auténtica finalidad" de las reuniones entre Cospedal y Villarejo, entonces comisario de Policía, "era el seguimiento de las novedades y avances de la investigación del caso Gürtel, llegando a dar al policía en el curso de una de esas reuniones indicaciones para recuperar y que desaparezca la libretita de Luis Bárcenas, cuyas anotaciones pudieran afectar a una financiación irregular del Partido Popular".
Por la operación Kitchen están procesados el exministro del Interior Jorge Fernández Díaz; su exnúmero dos Francisco Martínez; al exnúmero dos de la Policía Eugenio Pino y otros altos cargos policiales, además del propio Villarejo y quien fuese chófer de Bárcenas, Sergio Ríos, pieza clave en la trama al haber actuado supuestamente como confidente.