María Solana Arana (Pamplona, 5 de octubre de 1975) percibe que la voz navarra en el Congreso tiene cada vez menos fuerza. Apela al voto del 28-M y al saber hacer de Geroa Bai, y señala el reto: su escaño dejaría fuera a Sayas
¿Qué tal ha ido la campaña en Sanfermines?
–Yo estoy muy satisfecha. Desde el principio pensamos que podía convertirse en una oportunidad teniendo en cuenta que somos una coalición chiquitica donde el boca a boca es muy importante. Haber tenido tantas horas de calle para estar con tanta gente ha sido una gozada. La sensación es que, de otra manera, sin los Sanfermines de por medio, no lo hubiéramos podido hacer.
Han insistido mucho en que lo que se elige son cinco diputados navarros, que Navarra debe tener su propia voz en Madrid.
–Ese es el mensaje central. Representamos una Navarra que otros diputados no van a poder representar como Geroa Bai.
Muchos diputados navarros terminan diluidos en grandes grupos. ¿Sienten que esa voz navarra está huérfana?
–Lo tenemos claro. La cosa es si la gente esto también lo percibe. El navarro de a pie tiene que entender que es importante que el partido al que vota tiene que representarle y defenderle en Madrid. En ese sentido, en 2004 Barkos enseñó a UPN el camino al grupo mixto, porque hasta entonces los partidos navarros estaban desaparecidos en sus grandes ascendentes estatales. A diferencia de UPN, nosotras sí que podemos representar la Navarra al completo, la de todos y todas, la feminista, la euskaldun, la plural, la de colores. Y esto UPN no lo representa.
¿Por qué es importante que Geroa Bai tenga escaño?
–En Madrid, hoy, en esas Cámaras, se deciden cosas que afectan de forma decisiva a Navarra. Es importante estar ahí. Vamos a exigir garantías, respeto, inversión... lo que nos corresponde. Yo no he visto a Cerdán (PSOE) hacer esto. Ni tampoco de manera convencida a Pozueta (EH Bildu). Ni a los de UPN, que visto el resultado de su legislatura, se han dedicado a sus cosas. Y la señora ministra –por Ione Belarra– vino a hacer campaña hace cuatro años y ya no ha vuelto. Para eso es importante estar.
¿El recuerdo de las elecciones del 28-M le puede venir bien a Geroa Bai, un partido que fluctúa muchísimo sus resultados dependiendo de la cita electoral?
–Ojalá esta semana nos sirva para hacer entender que aquí no se elige ni a Sánchez ni a Feijóo, para dar a entender a esos 43.000 votantes que tuvimos el 28-M –y a los que se quedaron en casa– que nos vuelvan a votar, que vuelvan a apostar por Geroa Bai. Si han confiado en nosotros porque políticamente hacemos bien las cosas aquí, también las vamos a hacer bien en Madrid. Es importantísimo que ese recuerdo de voto lo refresquemos y lo atraigamos.
De las forales a las generales pierden 35.000, 40.000 votos. ¿Qué análisis hacen?
–Las campañas estatales duran lo que la legislatura. Hay gente que entiende que el comicio es distinto y requiere otro voto, cuando no es verdad, no tiene por qué. La decepción fue inmensa cuando vimos el cara a cara: volvemos a un bipartidismo aburrido y alejado de lo que Navarra necesita y representa, porque el Parlamento foral tiene siete fuerzas, no es bipartidista. Eso lo tenemos que intentar romper. Pero, claro, es muy difícil. Nosotras, en Madrid, vamos a apoyar gobiernos progresistas, de izquierdas. Pero lo haremos exigiendo para Navarra lo que Navarra merece, y respetando el autogobierno, como no ha ocurrido con la ley de vivienda, por ejemplo.
¿Alguna vez se han planteado no presentarse a las elecciones estatales?
–¡No tendría sentido precisamente por lo que estoy diciendo! Mientras en Madrid se decida algo que a Navarra le afecte, Geroa Bai tiene que estar ahí. El resto de partidos no van a representar lo que nosotros representamos aquí. Nos es infinitamente más difícil que al resto, pero es infinitamente más importante.
Usted ha dicho que el escaño se lo juega con el PP.
–Sayas hablaba de la emergencia nacional que dice que vivimos. Pues yo mando un SOS: Sayas o Solana. A la derecha se le frena quitándole escaños, es la mejor manera. La gente en Nafarroa puede debilitar al PP votando a Geroa Bai.
¿Cómo?
–Porque ese quinto escaño se lo lleva Solana y no Sayas. Si algo tenemos de bueno quienes concurrimos, salvo en el caso de Vox y tampoco supongo que vaya a ser ninguna sorpresa agradable, es que nos conocemos todos. Tenemos carta de presentación. Y creo que hay diferencia entre alguien que ha demostrado de qué es capaz con tal de mantenerse políticamente en un espacio que a mi entender no le corresponde