El espacio a la izquierda del PSOE afronta una de las mayores guerras internas en los últimos años en relación a la puesta en marcha de la plataforma Sumar de Yolanda Díaz, con la que se va a presentar a las elecciones generales de finales de año.
Y es que el acto del domingo en el que la vicepresidenta segunda anunció su candidatura, lejos de contribuir a un acercamiento a Podemos, ha intensificado la batalla abierta entre las dos siglas.
Díaz dijo en el mitin de Madrid que no aceptará “tutelas” de los morados y ayer dejó muy claro en una entrevista en El País que seguirá adelante con todo el proyecto aunque Podemos no se sume a él, dejando entrever que en Sumar no cuentan ya con los de Ione Belarra y que se abocan a que en las generales existan dos marcas diferentes a la izquierda del PSOE.
Belarra, por su parte, guarda silencio, así como su número dos, Irene Montero. Sin embargo, ayer fue muy explícito en su reacción el exlíder de Podemos, Pablo Iglesias, que trasladó a la vicepresidenta segunda que una división del espacio sería “una tragedia electoral y político”.
En una entrevista en RAC1, el fundador de Podemos criticó que hay “compañeros de Sumar” que no quieren primarias abiertas y defendió la necesidad de que su partido y la plataforma de la vicepresidenta segunda superen sus diferencias y firmen una coalición.
“¿Habrá primarias abiertas finalmente? Si las hay, creo que Podemos estará ahí. ¿Quieren todos los actores que las haya? Tengo mis dudas”, reflexionó Iglesias el día después de que Díaz lanzara su candidatura a la Presidencia del Gobierno. Según el exlíder de los morados, los que no quieren primarias en Sumar es porque podría implicar que Podemos “hiciera valer una representación y un peso que no es equiparable a sus apoyos mediáticos”.
En cualquier caso, reivindicó “que la unidad es más necesaria que nunca”, por lo que considera que es muy importante que Podemos y Sumar se pongan de acuerdo para unas elecciones generales que todavía no tienen fecha.
Según Iglesias, hay que ser inteligente en el diagnóstico de la situación, alegando que “esto va más allá de los sentimientos personales y de las pullitas, porque se trata de que en España gobierne la derecha y la ultraderecha” o de que esto no ocurra, y se revalide el actual Ejecutivo de coalición.
Díaz culpa a Belarra
Si los morados reprochan a la vicepresidenta segunda que no ha tenido verdadera intención de llegar a un pacto sobre primarias abiertas que hubiera desbloqueado la presencia de Podemos el domingo en el acto, Yolanda Díaz le da la vuelta y asegura que han sido los de Belarra los que no tenían intención alguna de estar. “Lo intenté hasta el último minuto y mi equipo más, pero han tomado la decisión de quedar fuera”, dijo en una entrevista en TVE.
Asimismo, Díaz rechazó que Sumar vaya a ser una sopa de siglas y reivindicó que es un movimiento ciudadano “completamente autónomo” y “no subalterno” de ningún otro partido, y con el que busca el voto de “la mayoría social” para las elecciones generales.
La también ministra de Trabajo señaló que en su plataforma, pese a no querer una “suma de siglas”, pueden formar parte muchas formaciones políticas, a la vez que dijo que no va a hacer ruido ni caer en el insulto a otros partidos, sino solo proponer propuestas políticas.
“Los partidos han de estar, pero no tienen que ser”, resaltó, al ser preguntada por cómo quedaría encajado Podemos en su proyecto de producirse el acuerdo, que hasta ahora no se ha materializado por las discrepancias entre ambas organizaciones a la hora de definir las primarias para elegir las listas.
En este punto, Díaz rechazó que lo que la separa de un acuerdo con Podemos sean las primarias. “No es verdad que tengamos diferencias en torno a las primarias, desde el principio lo he dicho”, indicó, asegurando que “ha de ser” Podemos quien tiene que “explicar” por qué, en un “día importante y alegre para España”, no estuvieron en el acto de presentación de Sumar.
Preguntada por el motivo que hace imposible ese acuerdo con el partido morado, defendió que desde Sumar “nadie” ha pedido condiciones para asistir al acto del domingo, al que estaba invitado “todo el mundo” y al que le hubiera gustado que asistiera la cúpula de Podemos.
Preocupación en Podemos
Lo que queda claro en las intervenciones de Yolanda Díaz es que está dispuesta a seguir adelante con su proyecto aunque ello conlleve que haya dos listas en las generales a la izquierda del PSOE, escenario arriesgadísimo debido al sistema de repartición de escaños y que preocupa sobremanera a Podemos, que entiende que dicha división entregaría el Gobierno español al PP y a Vox.
En ese sentido, ayer el coportavoz de la Ejecutiva morado, Pablo Fernández, lamentó que la vicepresidenta segunda no apueste “de forma rotunda” por la unidad después de que haya afirmado que “en absoluto” sería un fracaso que la formación morada no estuviera en Sumar.
“Nos preocupa que Yolanda Díaz no apueste de forma rotunda por la unidad”, resaltó Fernández en rueda de prensa. Así, los morados trasladan que Díaz debe decidir si quiere ser “la candidata de la unidad” o si prefiere presentarse a los comicios “solo con Sumar” y sin llegar a un acuerdo electoral con Podemos.