Los memes inundan las redes sociales y los grupos de WhatsApp desde hace unos cuantos años con temáticas de todo tipo. La mayoría nacen y desaparecen al cabo de unos días o semanas, algunos después de hacerse virales, pero otros permanecen con el paso de los años siendo aprovechados con diferentes objetivos.
Entre los que llevan bastante tiempo siendo habituales en cualquier teléfono móvil está el de un señor de pelo blanco y barba sentado frente a un ordenador portátil que sostiene una taza y que muestra una sonrisa que parece esconder un trasfondo de tristeza; de ahí que se le conozca como Hide the pain, Harold (esconde el dolor, Harold). Aunque se especuló con que podía ser una imagen creada de forma artificial, el señor existe y ese meme, que ha triunfado a nivel internacional ha cambiado su vida.
Pero ni siquiera se llama Harold, sino András Arató, y es un ingeniero eléctrico jubilado húngaro de 77 años que se convirtió en modelo para un banco de imágenes casi por casualidad. En 2011 subió a sus redes fotos de un viaje, un fotógrafo profesional las vio y le propuso realizarle unas cuantas precisamente para un banco de imágenes. Con el paso del tiempo una de ellas se hizo viral y se convirtió en meme por su sonrisa, aunque él no fue consciente hasta que alguien dio con su identidad y le mandó un e-mail para advertirle de la circunstancia.
Ese meme le cambió la vida, aunque sigue viviendo en Budapest con su mujer y su hijo. Al principio no le hizo gracia pasar de anónimo a famoso de la noche a la mañana por una casualidad, pero poco a poco lo aceptó y decidió convivir con ello y aprovechar las oportunidades que le ofrecía. Así, creó sus propias páginas de Facebook e Instagram y viajó a más de veinte países para algunos proyectos publicitarios, realizó una campaña para Coca-Cola en Hungría, ha dado charlas TED e incluso participó en la versión magiar de Mask Singer.