Hace solo unos días que Netflix estrenó Clanes, la nueva serie protagonizada por Clara Lago y Tamar Novas. La plataforma volvía a poner el foco en el mundo del narcotráfico y la jugada parece haberle salido bien, ya que desde su estreno ha liderado el ranking de lo más visto en el país. La historia nos sumerge en el pequeño pueblo de Cambados, donde una nueva abogada llamada Ana (Lago) llega con la intención de dejar atrás su pasado y comenzar de nuevo. Sin embargo, su presencia no pasa desapercibida, especialmente para Daniel (Novas), hijo de un importante narcotraficante y líder del clan de los Padín mientras su padre está tras las rejas. Ana, con una amplia experiencia en los mejores bufetes de Madrid, tiene como objetivo saldar cuentas con su pasado en este intrigante entorno.
Pero Clanes no es solo una historia que atrapa gracias a su mezcla de drama, thriller y romance. Pese a ser pura ficción, la nueva serie de la productora gallega Vaca Films (La Unidad, El desorden que dejas, Celda 211) está inspirada en varios hechos reales que ocurrieron en Galicia entre los años 90 y 2000.
‘Operación nécora’
Su principal fuente de inspiración es la llamada Operación Nécora. Esta operación policial generó un proceso judicial que dio inicio a una de las mayores y la primera de las redadas contra el narcotráfico gallego. Comenzó la mañana del 12 junio de 1990, cuando el juez Baltasar Garzón y el fiscal antidroga Javier Zaragoza movilizaron a más de 300 policías desde Madrid hasta la comarca del Salnés, en Santiago de Compostela. Fue ahí donde los agentes detuvieron a grandes contrabandistas de tabaco, reconvertidos en narcos. Entre los arrestados se encontraba Laureano Oubiña, mientras que otros como Sito Miñanco consiguieron escapar.
Detrás de esta histórica redada estaban las declaraciones de los llamados narcos arrepentidos, Ricardo Portabales y Manuel Fernández Padín, del clan de los Padín. Ambos confesaron a las autoridades todo lo que sabían a cambio de protección policial. Aun así Clanes es pura ficción y de ahí que en la serie el apellido Padín pertenezca a la familia que dirige todo el cotarro y que fuera el padre de Ana, la protagonista, quien sirviera como testigo protegido.
La abogada Tania Varela
Clanes también toma como inspiración la historia de Tania Varela y David Pérez Lago, el hijastro de Laureano Oubiña. Fue a mediados de los 2000 cuando saltó a la luz este caso. La joven abogada Varela, se mudó a Cambados para dirigir el Centro de Información a la Mujer y acabó enamorándose de Pérez Lago, iniciando así un camino equivocado por el que estuvo entre las más buscadas de la Europol y acabo siendo condenada por narcotráfico.