La huelga de personal de tierra del grupo de aerolíneas alemana Lufthansa alteró hoy los planes de unos 130.000 pasajeros, afectados por la cancelación de sus vuelos en los aeropuertos de Fráncfort y de Múnich.
Según fuentes de la compañía, han sido anulados unos 1.100 vuelos, prácticamente la totalidad de los previstos por la aerolínea en estos dos grandes aeropuertos.
La afluencia de pasajeros a sus terminales fue mínima, ya que Lufhansa había advertido previamente a los afectados de la cancelación de sus vuelos, además de recomendarles que no acudieran a los aeropuertos, sino que trataran de resolver su caso a través de la web o servicios de atención telefónica.
Junto a la posibilidad de reubicación de su vuelo en los próximos días, la compañía ofrece a los viajeros los mismos trayectos en ferrocarril para el caso de los vuelos dentro de Alemania.
Lufthansa había informado el sábado de la cancelación de más de 700 vuelos en Fráncfort, el aeropuerto de mayor volumen de pasajeros de Alemania. A ello se suman otros 350 de Múnich, el segundo gran eje para las conexiones internacionales de la compañía hacia el resto de Europa u otros destinos.
La huelga fue convocada por el sindicato del sector servicios Verdi para los 20.000 empleados que integran el personal de tierra de Lufthansa en Alemania.
El sindicato reclama para este sector un incremento salarial del 9,5 % o un aumento de al menos 350 euros al mes. La última oferta de Lutfthansa se sitúa en un 5,5 %, según fuentes sindicales, que lo consideran muy por debajo de la inflación acumulada desde el último convenio.