El proceso interno de votación entre la militancia para nombrar a las nuevas ejecutivas territoriales del PNV en la comunidad autónoma avanza con un respaldo mayoritario a los candidatos que partían como favoritos, Iñigo Ansola para el Bizkai Buru Batzar, Jone Berriozabal para Araba, y Maria Eugenia Arrizabalaga para Gipuzkoa, aunque en este último caso el resultado es más reñido y se ha visualizado una división de opiniones en los batzokis de la capital, Donostia, con varios de ellos inclinados a favor del alcalde Eneko Goia. Estos tres candidatos que concitan mayor consenso ya están en condiciones de pasar a la segunda vuelta del proceso.
Por otro lado, en sentido estricto y a falta de que lo valide la Comisión de Garantías, el único candidato alternativo que es seguro que pasará a la segunda vuelta es el aspirante crítico al Bizkai Buru Batzar, David Salinas-Armendariz, el único que se presenta expresamente como alternativa y con un documento que está circulando por los batzokis con críticas de “clientelismo” y “amiguismo”. El miércoles obtuvo su pasaporte a la segunda ronda tras alcanzar el mínimo indispensable, el respaldo de dos batzokis, el de Abando y la organización municipal en la que está afiliado, Ondarreta, en Getxo. Los otros dos nombres principales que han aflorado en el proceso, el diputado foral alavés Gorka Urtaran y el alcalde donostiarra Eneko Goia, han sido propuestos por las bases, aunque no se han manifestado en ningún sentido y se desconoce si tienen aspiraciones.
¿Aspiraciones?
En este contexto, parece que la principal incógnita se cierne sobre las intenciones de Urtaran. Que no acudiera a las votaciones internas celebradas en Gasteiz el miércoles por la tarde puede dar pábulo a todo tipo de especulaciones. Pudo haber aclarado ahí sus planes, pero no apareció. Cabe recordar que otras personas que han salido a relucir por sorpresa se han manifestado a través de sus redes sociales o en otros ámbitos para aclarar que no estaban al corriente de esos movimientos ni tienen aspiraciones. El exalcalde de Gasteiz no lo ha hecho y, a medida que pasa el tiempo, parece que ya ha perdido toda razón de ser que lo haga ahora. Podría esperar a que acabe la primera vuelta y hablar la semana que viene o, directamente, esperar a que termine todo el proceso y celebrar una segunda vuelta con dos candidatos, él y Jone Berriozabal. De todos modos, a estas alturas la ventaja de Berriozabal es tan clara que no habría margen para la sorpresa. Ella ganó en los cuatro batzokis de Gasteiz y acumula respaldos en otras plazas.
En el caso de Goia, como informó este periódico, fue propuesto en Amara por personas de su entorno, pero está por ver si el alcalde tiene en mente otra cosa que no pase por seguir al frente del ayuntamiento.