La industria cárnica ha alertado del impacto que podría tener no solo para el porcino, sino para el conjunto del sector cárnico, las posibles represalias de China contra los productos agroalimentarios de la UE, después de que la Comisión Europea anunciara un aumento del derecho de importación a los coches eléctricos procedentes de China como consecuencia de una investigación sobre posibles subvenciones desleales, según informa Anice - Asociación de Industrias de la carne, en un comunicado.
En concreto, el sector advierte de que ya existen indicios de que China esté considerando "seriamente" adoptar medidas de represalia contra los productos agroalimentarios de la UE, siendo la carne de cerdo, incluidos los despojos comestibles, uno de los primeros sectores que se "verían gravemente" afectados por esta tensión comercial, que temen que pueda extenderse al resto del sector cárnico.
Preocupación en el sector
"Estamos preocupados. Tememos que las consecuencias de esta tensión económica entre Europa y China puedan volverse contra el sector cárnico de nuestro país y amenace nuestro 'status quo' como primer exportador de carne de porcino de Europa y segundo del mundo", manifiesta el director general de Anice, Giuseppe Aloisio.
En 2023 el sector en su conjunto logró alcanzar una cifra récord de exportaciones de 10.583 millones de euros y una balanza comercial del 625%, superando las ventas al exterior de 2022, en un 6,2%. Unas cifras en las que el porcino fue clave, situando al Estado español a la cabeza del ranking europeo, y en segundo lugar a nivel mundial.
En concreto, el pasado año las exportaciones españolas de porcino a China superaron las 560.000 toneladas por un valor de 1.223 millones, lo que convirtió al país asiático en el destino del 20,33% de las ventas españolas exteriores de porcino.
Medidas de control
De esta forma, Anice, que representa a la industria cárnica a nivel nacional e internacional y agrupa a más de 600 empresas, ha solicitado a los Ministerios de Economía, Comercio y Empresa, competente en la regulación del comercio internacional de mercancías y al de Agricultura, Pesca y Alimentación, que se activen todas las medidas de contención previstas en estos casos, dado el enorme perjuicio que supondría para las empresas exportadoras españolas.
Además, ha pedido que se mantengan los cauces de comunicación vivos para mantener informadas en tiempo real a las industrias cárnicas, ante la repentina avalancha de problemas que podrían producirse en las próximas semanas.
Actualmente se trabaja en distintos ámbitos de nuevas aperturas de productos españoles, además de seguir avanzando en la apertura del vacuno, anunciada en el mes de febrero de este año y del ovino.