El Plan de Choque contra el fraude en la contratación puesto en marcha por la Inspección de Trabajo de la CAV durante los meses de febrero y marzo de este año ha logrado convertir en indefinidos 2.334 contratos, 1.613 de ellos temporales y 721 fijos discontinuos.
En el caso de los temporales se ha transformado el 36,7 % de los que, según el programa informático de Herramienta de Lucha contra el Fraude (que emplea tecnología big data), podrían estar en una situación irregular. En el caso de los fijos discontinuos el porcentaje se eleva al 44,48 %.
Desde el año 2018 la Inspección de Trabajo en Euskadi desarrolla periódicamente diversas campañas de lucha contra el fraude en la contratación temporal.
En concreto, entre los meses de febrero y marzo se remitieron dos remesas de cartas tras detectar casos contrataciones temporales que ocupan puestos estructurales, así como irregularidades en el uso del contrato fijo discontinuo.
Igualmente, se remitieron misivas para la revisión de contratos realizados a través de Empresas de Trabajo Temporal para la cobertura de necesidades estructurales, lo que constituye un fraude de ley.
En lo que respecta a la contratación temporal, la Inspección envió 1.506 cartas a otras tantas empresas para revisar la situación de 4.401 contratos que la Herramienta de Lucha contra el Fraude había detectado que podrían haber cometido fraude.
De esas comunicaciones, 245 correspondían a Araba con 963 contratos afectados, 845 a Bizkaia con 2.350 contratos, y 416 a Gipuzkoa con 1.088.
En las misivas se explicaba que la contratación temporal está asociada a necesidades temporales de las empresas y no a cubrir puestos de trabajo estructurales, lo que puede derivar en una contratación injustificada y en fraude de ley.
Como consecuencia de este envío, las empresas afectadas en el plazo de un mes, han regularizado 1.613 contratos, el 36 % de los que estaban bajo sospecha.
Por territorios el porcentaje más alto se ha localizado en Gipuzkoa (42,8 %), seguido de Bizkaia (37,9 %) y Araba (26,6 %).
Una vez pasado el plazo de regularización voluntaria, la Inspección de Trabajo ha puesto en marcha este último trimestre del año la segunda fase de este plan de choque consistente en las correspondientes actuaciones inspectoras a las empresas incumplidoras.
La campaña de febrero buscaba también la detección de contratos fijos discontinuos fraudulentos. En concreto, se enviaron 585 cartas que podían afectar a 1.621 trabajadores.
La distribución geográfica era de 76 empresa en Araba con 212 contratos afectados, 314 en Bizkaia con 898 contratos, y 195 en Gipuzkoa con 509 contratos.
Una vez finalizado el periodo voluntario, se han regularizado 721 contratos, el 44,5 % de los que estaban bajo sospecha por la Herramienta.
Gipuzkoa ha acumulado el mayor número de regularizaciones, 263 (50,6 %), seguida de Álava, 73 contratos (38,6 %), y Bizkaia con 385 contratos transformados (37,7 %).
En esta modalidad de contratación ha comenzado también la fase de la actuación de la Inspección de Trabajo.
Según el Gobierno vasco, la entrada en vigor de la reforma laboral en 2022 ha provocado un cambio profundo en la forma de contratación de las empresas.
Antes se realizaban muchas contrataciones temporales, sin embargo, la reforma establece el contrato indefinido como norma, y los temporales deben estar justificados.
Este hecho, unido a la labor que desarrolla la Inspección de Trabajo hace que cada vez sea menos habitual el fraude en este tipo de contratación.