Elegir y mantener los neumáticos adecuados es crucial para una conducción segura. Aunque a menudo se pasa por alto, el costado de los neumáticos contiene un código de velocidad que indica la máxima velocidad que estos pueden soportar de forma segura.
Este código, representado por una letra, especifica los límites de velocidad que pueden soportar los neumáticos antes de comprometer su rendimiento. Así, conocer y comprender esta información puede ser la diferencia entre una conducción segura y un riesgo en la carretera.
La velocidad máxima está en los neumáticos
Cada neumático lleva impresa en su costado una serie de letras y números que indican diversas especificaciones, y entre ellas se encuentra el código de velocidad, una letra que revela el límite máximo de velocidad que ese neumático en particular puede soportar de manera segura. Este código abarca un rango de letras, desde la "L" hasta la "ZR", que cubren diferentes rangos de velocidad, con variaciones que van desde los 110 km/h hasta más de 240 km/h. Así, por ejemplo, un neumático marcado con la letra "T" soporta una velocidad máxima de 190 km/h, mientras que uno con la letra "V" es apto para velocidades de hasta 210 km/h.
Es importante que los conductores revisen esta letra y la tengan en cuenta, sobre todo en situaciones donde se puedan alcanzar altas velocidades, ya que exceder el límite especificado por el fabricante puede provocar un desgaste más acelerado o incluso la posibilidad de un fallo del neumático. Esto se debe a que los neumáticos están diseñados para trabajar de manera óptima hasta cierta velocidad, manteniendo una buena adherencia y resistencia a la temperatura generada por la fricción con la carretera.
- K: 110 km/h
- L: 120 km/h
- M: 130 km/h
- N: 140 km/h
- P: 150 km/h
- Q: 160 km/h
- R: 170 km/h
- S: 180 km/h
- T: 190 km/h
- V: 210 km/h
- H: 240 km/h
- W: 270 km/h
- Y: 300 km/h
- ZR: > 240 km/h
Límites de velocidad según el tipo de carretera y sus sanciones
En el Estado, los límites de velocidad varían según el tipo de vía. En las autopistas y autovías, el límite máximo para turismos y motocicletas es de 120 km/h, mientras que en carreteras secundarias este límite se reduce a 90 km/h, salvo en aquellos tramos especialmente señalizados donde puede variar. En zonas urbanas, la velocidad permitida suele ser de 50 km/h o, en calles de un solo carril, puede reducirse incluso a 30 km/h. Dado que estos límites son inferiores a la mayoría de las velocidades máximas que soportan los neumáticos de los coches modernos, muchos conductores pueden desconocer el código de velocidad de sus neumáticos al no alcanzar esas velocidades en el día a día.
Sin embargo, es esencial recordar que exceder los límites establecidos en carretera conlleva sanciones, que pueden variar desde una multa económica hasta la pérdida de puntos del carnet de conducir, e incluso penas mayores en caso de exceso grave. Por ejemplo, superar los 120 km/h en una autopista hasta un margen de 30 km/h supone una multa de 100 euros, pero sobrepasar esta velocidad por más de 80 km/h conlleva la retirada de 6 puntos y una sanción de 600 euros. Estas normas buscan garantizar una conducción más segura y evitar situaciones de riesgo en las que se superen los límites que los neumáticos o el vehículo pueden soportar con estabilidad.
Señal de límite de velocidad en el centro de Bilbao a 30 km/h
Cada cuánto tiempo debes cambiar los neumáticos
Los neumáticos deben ser revisados y reemplazados regularmente, pues el desgaste afecta directamente su adherencia y capacidad de respuesta, lo que puede reducir su efectividad y la seguridad del vehículo. En general, se recomienda cambiar los neumáticos cada 40.000 a 50.000 kilómetros o cada 5 años, aunque este periodo puede variar según el tipo de neumático, el estilo de conducción y las condiciones de la carretera.
Además del kilometraje, es importante revisar periódicamente la profundidad del dibujo en el neumático, pues una profundidad menor a 1,6 mm es motivo para un cambio inmediato, dado que compromete la capacidad de frenado y tracción, especialmente en condiciones de lluvia. Otras señales de que es momento de cambiar los neumáticos incluyen la presencia de grietas, deformaciones o bultos, que pueden indicar daños estructurales que aumentan el riesgo de reventones o pérdida de control.
Neumáticos
Qué debes tener en cuenta a la hora de elegir los neumáticos
Elegir los neumáticos adecuados para un vehículo implica considerar varios factores. En primer lugar, es fundamental que el neumático tenga la misma medida y características que el recomendado por el fabricante del automóvil, ya que cualquier modificación podría afectar el rendimiento y seguridad del vehículo. Además del tamaño, la letra del código de velocidad, como se ha mencionado, es esencial para asegurar que el neumático sea capaz de soportar la velocidad máxima que se desea alcanzar.
Otro factor clave a tener en cuenta es el tipo de neumático. Existen opciones específicas para verano e invierno. Los neumáticos de invierno están diseñados para mantener una mejor adherencia en temperaturas frías y superficies resbaladizas, mientras que los de verano se enfocan en el rendimiento en condiciones secas y cálidas. Por su parte, los neumáticos "all seasons" o cuatro estaciones son una opción intermedia para quienes conducen en climas variables sin temperaturas extremas. También es importante verificar el índice de carga, que indica el peso máximo que cada neumático puede soportar, y asegurarse de que sea adecuado para el uso y carga del vehículo.
Por último, el tipo de terreno por el que se circula con frecuencia influye en la elección. Quienes recorren caminos con condiciones adversas, como zonas de grava o montaña, necesitarán neumáticos con mayor resistencia a las perforaciones y un dibujo más profundo para garantizar la tracción.