Iberia y sindicatos retoman hoy las negociaciones sobre el futuro laboral de los 4.000 empleados de tierra (handling) que temen ser subrogados por parte de otras empresas, que, en principio, han de mantener sus condiciones laborales hasta el final de 2025.
“Cambiar de una compañía a otra mediante la subrogación no supone un cambio de convenio colectivo, ya que los trabajadores conservan el que se aplicaba en la empresa de origen”, explica la presidenta de la Asociación Nacional de Laboristas (Asnala), Ana Gómez.
Así lo determina el artículo 44 del Estatuto de Trabajadores, que primará siempre por encima de los convenios específicos de sectores y empresas, que no pueden empeorar las condiciones laborales establecidas en la citada normativa.
La empresa cesionaria –aquella que absorbe a los empleados– debe garantizar el cumplimiento del convenio de la empresa cedente en los trabajadores afectados por el traspaso, hasta que expire dicho convenio o el de la entidad que incorpora a la plantilla. De esta forma, los trabajadores subrogados de Iberia se encontrarían guarecidos por el convenio de la aerolínea hasta el 31 de diciembre de 2025 –fecha en la que caduca–, que coincide con el fin de la vigencia del pacto laboral sectorial.
La presidenta de Asnala añade que los trabajadores subrogados únicamente se verían desligados de su anterior convenio antes de tiempo si entrase en vigor uno nuevo en la empresa cesionaria o en el supuesto de que se iniciase una negociación colectiva respecto a este asunto.
“Las negociaciones colectivas suelen ser complicadas por la dificultad de definir a los elementos legitimados para participar, especialmente por parte de los trabajadores”, ya que los interlocutores pueden ser los “representantes laborales del ente cesionario o los del cedente, que acostumbran a tener intereses diferentes”, dice.
El convenio sectorial del handling señala que la subrogación no debe empeorar las condiciones económicas de los trabajadores, sin perjuicio de que, si las de la cesionaria fueran más favorables, se les aplicarían las mejores. Iberia cuenta con mejores niveles salariales y de antigüedad y mayores facilidades para acceder a billetes de avión. El objetivo de los sindicatos –CCOO, UGT y USO– es que los 4.000 trabajadores afectados por una posible subrogación se mantengan bajo la órbita de Iberia.
Se trata de la plantilla de handling de Barcelona, Mallorca, Málaga, Alicante, Gran Canaria, Tenerife Sur, Ibiza y Bilbao, que podrían pasar a Aviapartner, Groundforce, Menzies y Swissport, los operadores ganadores de una licencia para ofrecer el servicio en los citados aeropuertos.
Las organizaciones sindicales solicitan que la aerolínea conserve a sus trabajadores mediante la asistencia en tierra a sus propios aviones, un opción válida para Aena y que realizan otras compañías como Ryanair o easyJet. Pese a considerarla en un principio una opción “poco rentable”, Iberia ha propuesto la creación de una empresa participada integramente por el grupo IAG –al que pertenece junto a Vueling, British Airways, Level y Air Nostrum– para realizar autohandling a las naves del holding y acoger a los 8.000 empleados de tierra de la compañía.
El plan de Iberia incluye un programa de prejubilaciones y bajas incentivadas a partir de los 56 años para 1.727 personas, que serían reemplazadas mediante nuevas contrataciones. A pesar de ofrecerse el autohandling y evitar la subrogación, los sindicatos no aprueban que esta nueva compañía absorba al conjunto de la plantilla del sector y abogan por que solo acoja a los 4.000 empleados de los aeropuertos que perdió Iberia.