PNV y PSE aprobaron en el pleno del Parlamento Vasco, con el rechazo de los grupos de la oposición, la Ley de Salud Pública de Euskadi que, entre otros aspectos, recoge la forma de actuar en caso de la declaración de una pandemia y contempla la posibilidad de que Osakidetza pueda contratar personal extracomunitario cuyas especialidades se declaren “deficitarias o de difícil cobertura”. El grueso de la Ley recibió el apoyo de los grupos en el Gobierno, PNV y PSE, mientras que todos los grupos de la oposición –EH Bildu, Elkarrekin Podemos-IU, PP y Vox– votaron en contra y el parlamentario de C’s se abstuvo.
En el pleno, la consejera de Salud, Gotzone Sagardui, presentó el contenido de la nueva norma estructurado en 120 artículos. Según recordó, hasta ahora se ha contado como marco con la Ley de Ordenación Sanitaria de 1997, pero desde entonces, el concepto de salud pública “ha evolucionado y se ha ampliado notablemente”.
La consejera subrayó que “la pandemia declarada en 2020 puso de manifiesto la importancia de la salud pública como pieza primordial del sistema de salud”, así como la “importancia de la transversalidad en las actuaciones, y la falta de herramientas de las que disponíamos para poder facilitar respuestas inmediatas a circunstancias excepcionales”.
Nacionalidad
Entre otros aspectos, la norma introduce, a través de la disposición adicional sexta, la exención del requisito de la nacionalidad para el acceso a la condición de personal estatutario de determinadas categorías de personal en las organizaciones dependientes de Osakidetza para cubrir especialidades “deficitarias o de difícil cobertura”.
Sagardui destacó “la configuración del sistema de salud pública de Euskadi como un sistema integrado por todos los servicios, prestaciones e instrumentos de gestión y coordinación que intervienen en salud pública, destacando la importancia de las y los profesionales”. Además, prevé la creación de “nuevas herramientas institucionales” como el instituto vasco de salud pública.
La parlamentaria de EH Bildu Rebeka Ubera, criticó que el Gobierno “no ha querido que se recogiera en esta ley a los cuidados como determinante”, lo que “muestra con qué visión reducida se va a aprobar esta ley y cómo entienden la sanidad pública quienes gobiernan ahora”. El parlamentario del PSE Ekain Rico defendió que la pandemia “puso de manifiesto la necesidad de reforzar la normativa, los mecanismos, y herramientas para dar mejor respuesta a cualquier emergencia sanitaria”.