El proyecto de la Ley de Empleo encara su última fase de tramitación parlamentaria previa a su aprobación definitiva con el respaldo de los grupos del Gobierno (PNV y PSE), que tienen mayoría absoluta, el rechazo de EH Bildu y la abstención de Elkarrekin Podemos-IU y PP.
La Comisión de Empleo del Parlamento Vasco ha dado este lunes el visto bueno al dictamen de esta ley, que incorpora enmiendas de la oposición. Este es el último paso previo antes de su aprobación definitiva en un pleno que previsiblemente tendrá lugar antes de que finalice el año.
Durante la tramitación parlamentaria se han incorporado al texto 8 enmiendas de Elkarrekin Podemos-IU, grupo con el que los grupos de Gobierno han transaccionado otras 14; así como sumado 5 de EH Bildu, más otras 9 transadas, y 3 añadidas del PP.
Si los grupos mantienen las posiciones hechas públicas hoy la ley recibirá el apoyo final de PNV y PSE-EE, el voto contrario de EH Bildu y la abstención de Elkarrekin Podemos-IU y PP. Ciudadanos y Vox, que integran el grupo mixto, no han participado en la comisión.
La parlamentaria abertzale Pazis García ha calificado de "decepcionante" tanto el contenido del texto como su proceso de elaboración porque los grupos del Gobierno no han tenido "voluntad de llegar a acuerdos" ya que su "objetivo era aprobar la ley cuanto antes, para que no terminara la legislatura".
García ha considerado además que la norma se queda "lejos de las expectativas creadas por el Gobierno en su presentación" porque no hay una "transformación" de Lanbide", que además sufre un "paso atrás": "se debilita su carácter público convirtiéndolo de nuevo en un ente público de derecho privado".
Jon Hernández, de Elkarrekin Podemos-IU, ha opinado que "no es una mala ley, aunque le siguen faltando cosas importantes como el fortalecimiento de Lanbide -ha criticado también su cambio de personalidad jurídica- y la "falta de equilibrio entre las necesidades de los trabajadores y las empresas".
Aunque el dictamen incorpora "bastantes enmiendas" de la coalición morada, el texto "no se ha modificado tanto como nos gustaría", ha añadido Hernández, que ha justificado así la abstención de su grupo.
PNV y PSE: Ha habido un debate profundo
Desde el PNV y el PSE, el jeltzale Jon Aiartza, ha asegurado que se han mostrado "dispuestos a incorporar propuestas" de la oposición "desde el principio de realidad y buscando el máximo consenso".
Ha calificado de "profundo, serio y alejado de la crispación" el debate que han mantenido los grupos y ha achacado al "escenario de final de legislatura" el hecho de no haber llegado a acuerdos de mayor calado.
También el socialista Ekain Rico ha admitido que "en el tramo final de la legislatura se hace más difícil sumar síes", pese a lo cual -ha destacado- se han incorporado y pactado varias enmiendas de los grupos de oposición, a los que ha agradecido su "actitud tan pragmática".
Este proyecto de Ley pretende ordenar el ámbito del empleo, en el que operan unos 300 agentes en Euskadi, mediante una red que los englobe y comparta información y una base común de ofertas de puestos de trabajo con el fin de lograr una mayor eficacia del sistema y evitar duplicidades.
Plantea la obligación de los municipios con más de 10.000 habitantes (solos o agrupados) de tener planes de empleo y desarrollo local, y crea el derecho a las políticas activas de empleo (ahora no existe de manera exigible), que garantizará Lanbide mediante el establecimiento de itinerarios de formación y orientación laboral.
Así, se pretende que en un plazo de doce meses desde la aprobación de ley todos los parados usuarios del sistema dispongan de un plan de actuación, comenzando por aquellos de larga duración.
La nueva red vasca de empleo planteará una ventanilla única electrónica y una ventanilla única por sede territorial, a través de la que el usuario podrá acceder a las ofertas de empleo.
Aunque el Gobierno vasco es el responsable de la planificación en materia de empleo, la nueva ley reconocerá por primera vez un espacio competencial propio en la materia a ayuntamientos y diputaciones, que trabajarán en sus respectivos territorios de acuerdo con la estrategia vasca de empleo.