La Liga ha anunciado que el partido entre Osasuna y Getafe del próximo domingo 18 de septiembre pasa a disputarse a las 14.00 horas, enfadando nuevamente a la afición rojilla que paga su abono. Inicialmente, el duelo estaba previsto para las 18.30 en El Sadar. Aún es pronto para determinar con exactitud el tiempo que hará el próximo domingo; la previsión marca temperaturas por encima de los 25ºC y cielos parcialmente despejados. En partidos anteriores disputados en horario diurno no han sido pocos los socios y aficionados que se han quejado por la programación en estas franjas horarias debido al intenso calor.
LaLiga vuelve a marear a la afición con sus cambios y los mensajes de indignación en redes sociales no se han hecho esperar, instando además al club navarro a no quedarse de brazos cruzados. "¿A 5 días cambiando horarios? ¿Y si la gente había hecho planes? Luego querréis ser la mejor liga del mundo… Estáis en la Edad Media con respecto a la Premier League. Todo para las televisiones y a los aficionados que les den morcilla...".
"Me parece de vergüenza, el anterior partido en El Sadar infernal y repetimos, a ver si empieza el club a ponerse las pilas, no deberían permitirse ese tipo de cambios y menos a estas alturas", manifiesta un aficionado en Twitter.
Osasuna ha reaccionado y los aficionados que hayan adquirido entradas para el partido ante el Getafe hasta esta mañana, y a causa del cambio de horario no puedan asistir, pueden solicitar la devolución del importe escribiendo a socios@osasuna.es y adjuntando el PDF con los tickets.
Osasuna llama la atención
Osasuna firmó anoche ante el Almería la cuarta victoria en cinco partidos ligueros que le asienta en posiciones europeas y sirve para registrar su segundo mejor arranque en cinco fechas de toda su historia. Tras los nueve puntos sumados ante Sevilla, Cádiz y Rayo, la expedición que comanda Jagoba Arrasate puso rumbo a Andalucía para dar un nuevo paso hacia la permanencia y así igualar un dato que llama a la ilusión. Tan solo el tanto del Chimy Ávila certificó tres nuevos puntos para los navarros, pero el guion del choque no dijo lo mismo.
Osasuna tiró en 15 ocasiones por 7 de su rival, algunas tan claras como la de Budimir, el gol anulado a Rubén García o la volea de Lucas Torró al palo. A pesar de ello, Iglesias Villanueva decretó el final después de unos minutos agónicos en los que los rojillos se encerraron peligrosamente en su campo.
Con el pitido llegaron los abrazos, muestras de cariño y la descarga de emociones de un equipo unido y convencido del objetivo a seguir, la permanencia. La cifra, además del cuarto puesto igualado a puntos con el Betis (3º) eran los 12 puntos de 15 posibles.
Tan solo en la temporada 81/82 los aficionados navarros vieron mejores registros con cuatro partidos ganados y un empate. La realidad fue que el equipo terminó en décima posición. Para ver la relevancia del momento que atraviesan los de Arrasate hay que tener en cuenta también otros datos.