El sol lucía con ganas en Donostia, pero de repente se ha puesto a llover para sorpresa de más de un viandante poco después de las 17:00 horas de este jueves. Ha sido un episodio breve, de apenas diez minutos, pero que ha sorprendido a propios y extraños: ¿cómo es posible que llueva si el cielo está azul, con muy pocas nubes?
El pronóstico de Euskalmet ya había anticipado que a partir de este jueves por la tarde habría ocasión para que las tormentas puntuales tomaran protagonismo, aunque no de la manera que han arrancado en la capital guipuzcoana, con el sol luciendo en todo su esplendor. Todo apunta a que el viernes y el fin de semana las tormentas regresarán, pudiendo llegar en algunos casos acompañadas de granizo.
Más allá de la explicación científica, el dicho popular del "lluvia con sol" se suele referir a cualquier evento extraordinario, un fenómeno que en muy pocas ocasiones sucede. A partir de ahí se abre el espacio para las leyendas, como la estadounidense que considera que mojarse con esa lluvia es señal de buena suerte.