La factura de la luz de septiembre será la más cara del año. Con una potencia contratada de 4,4 KW y un consumo mensual de 250 KWh distribuido en los diferentes periodos (punta, llano y valle), un consumidor tipo del mercado regulado pagará un factura de 56,9 euros. A pesar del incremento, el precio de la electricidad sigue siendo más barato que el año pasado, cuando se batieron todos los récords; de hecho, la factura de septiembre se pagó a 95,2 euros. Desde la pandemia, el precio de la luz aumentó de forma muy significativa, lo que obligó al Gobierno español a tomar medidas, que se tradujeron en rebajas de impuestos.
En 2020, año del confinamiento, se pagó el precio de la luz más bajo debido a la reducción de la demanda de todos los servicios, principalmente industriales y de negocios. En 2021, en cambio, los precios empezaron a subir de manera alarmante. Desde finales de 2020, y más intensamente en marzo de 2021, el precio del mercado mayorista de la electricidad en el Estado español destacaba por sus precios inusualmente altos, que amenazan con mantenerse en la segunda parte de ese año. El recibo de la luz de un usuario medio se disparó un 46,5% en las tres primeras semanas de junio, frente al mismo periodo del año anterior, lo que provocó la primera medida, la rebaja del IVA a la electricidad del 20 al 10%.
Después llegó la guerra de Ucrania en febrero de 2022 y los precios se dispararon a cifras nunca vistas. Es por ello que, en junio de ese año, el Gobierno volvió a rebajar el IVA del 10 al 5% actual. Estas medidas han reducido un 80% los impuestos vinculados a la factura de la luz. Sin embargo, todo parece indicar que a partir del próximo 1 de enero esas rebajas de impuestos van a llegar a su fin, en un momento además en el que el precio de la electricidad y el gas está subiendo de nuevo.
“Regresar al 21% claro que afectaría a la factura de la luz. Calculando un hogar que consuma 3.000 kilovatios hora al año con una potencia de 4 KW con el precio medio actual, que estamos aproximadamente al día en 0,17-0,18 KWh, la factura pasaría de 48-49 euros a 58-59 euros aproximadamente. Estamos hablando de que si se llegan a terminar las medidas y regresamos a los porcentajes que teníamos anteriormente , habría un aumento del 20% aproximadamente”, explica Alejandra Caballero, portavoz del comparador de tarifas Selectra.
Además, las estimaciones se hacen en el mercado a futuro hablan de un aumento en el precio de la luz. “Es algo que, por más medidas que se tomen, es una estacionalidad. Los mismo que ocurre en verano que con las olas de calor aumenta la demanda y eso hace que los precios se disparen. Pues lo mismo en invierno. Actualmente tenemos una media de 118 euros/MWh (el pasado jueves); para octubre, el mercado a futuros nos dice la media puede ser de 107 euros/MWh, pero a partir de noviembre empieza a subir, vamos de 111 euros/MWh a 116 euros/MWh en diciembre, a 124 euros/MWh en enero y a 121 MWh en febrero. Como siempre, esa estacionalidad, la llegada del invierno, que se empiezan a encender las calefacciones, a lo que se suma a que el precio del gas que ha estado subiendo desde agosto, hace que se estime un aumento de precios todavía con las medidas que tenemos hasta diciembre y luego habrá que esperar a lo que diga el Gobierno”, apunta la experta.
“Con esta expectativa que tenemos del mercado de futuros de que los precios sigan subiendo, veremos si Gobierno determina que esos beneficios pueden alargarse por más tiempo o qué es lo que va a pasar, porque tampoco sabemos si se regresaría al IVA al 21% o al 10%”, concluye.
Mercado del gas
Los altos precios de los futuros prevén también un aumento del precio del gasta este invierno. El gas se ha visto afectado también por la guerra de Ucrania, a lo que se suma “la alta demanda que ha hecho que se empiece a consumir el gas de las reservas que se tenían para invierno” y las huelgas en las plantas de Gorgon y Wheatstone en Australia, instalaciones que representan alrededor del 7% del suministro mundial de gas natural licuado (GNL) y están gestionadas por la petrolera Chevron.
De hecho, los analistas del Banco de España han percibido, de junio a septiembre, un incremento sustancial del precio de los carburantes y una tendencia al alza de los precios energéticos en su conjunto que les ha llevado a modificar su visión sobre el futuro. Así, han diluido el optimismo sobre la evolución de los precios del pasado mes de junio y han vuelto a revisar al alza sus previsiones de inflación para este año, del 3,2% al 3,6%, como para el que viene, del 3,6% al 4,3%.
Ante esta subida de los precios, desde Selectra recomiendan, en primer lugar, tener revisado el contrato de luz. “Hay gente que pasa más de un año y no ha revisado su contrato. Y lo que hacen normalmente las empresas es subir el precio cuando se cumple un año de contrato”, explica Caballero. En segundo lugar, es importante tener una potencia adecuada al consumo. “Y luego, tener electrodomésticos con etiqueta, revisar que no tengamos aparatos enchufados, que también eso nos va haciendo un consumo silencioso que genera un gasto”. Y, en la época de frío, que se empieza a encender la calefacción, “para quien tiene gas y electricidad, lo mejor es dar prioridad al uso del gas, que es más barato que la electricidad, y poner la temperatura máximo a 21 grados”.
Los datos
31 de diciembre
Fin de las rebajas. La rebaja de impuestos al 5% de la electricidad llegará a su fin el 31 de diciembre si el Gobierno español no la extiende. Y todo parece indicar que no será así. Queda por saber si se volverá al 10% que había antes de junio de 2022 o al 21% de antes de junio de 2021.
107 euros
Precio del MWH. Para octubre, el mercado a futuros nos dice que esa media puede bajar a 107 euros/MWh, pero a partir de noviembre empieza a subir, vamos de 111 euros/MWh a 116 euros/MWh en diciembre, a 124 euros/MWh en enero y a 121 MWh en febrero.
57 euros
Factura. En septiembre, la electricidad se ha pagado de media a 103,6 euros/MWh, un 8% más que en agosto y cerca de un 14% por encima del importe de julio. Así, la factura de la luz del mercado regulado o PVPC rondará los 57 euros, con lo que se situará como la segunda más cara de 2023, solo por detrás de la que pagaron los consumidores en febrero, aunque sigue siendo un 40 % más barata que hace un año.