Cultura

La marea naranja volverá a las calles si la caza no se excluye de la ley de derechos de los animales

A pesar de las promesas realizadas por el PSOE al sector cinegético, el proyecto de ley aprobado el 1 de agosto sigue incluyendo a la caza
Movilización de cazadores en Madrid.

A finales de marzo y en una reunión celebrada en la sede del PSOE en la madrileña calle de Ferraz entre miembros de la Ejecutiva del partido, de la Real Federación Española de Caza (RFEC) y de la Oficina Nacional de la Caza (ONC), la formación que lidera el Gobierno de España se comprometió ante el sector cinegético a que la futura Ley de Protección, Derechos y Bienestar de los Animales no incluiría en su articulado a la actividad cinegética, ya que los animales auxiliares de la caza quedarían excluidos del contenido de la normativa.

Sin embargo, el Consejo de Ministros aprobó el pasado día 1 de agosto el proyecto de la citada ley (que debe pasar todavía tanto por el Congreso como por el Senado, antes de su aprobación definitiva) y, en ella, continúan apareciendo los animales empleados en la caza. A pesar de la función y el trabajo que realizan, y a su particular naturaleza vinculada a la actividad cinegética, el Ejecutivo central no ha incluido a estos animales entre las excepciones de la ley, tal y como prometió en el encuentro de marzo. Por tanto, y de aprobarse finalmente la ley, los cazadores se expondrían a una gravísima situación de indefensión jurídica.

Así lo ha denunciado esta misma semana la RFEC, que ha avisado al Gobierno de que las federaciones autonómicas de todo el país no se quedarán con los brazos cruzados y saldrán de nuevo a las calles, en unas protestas similares a las del pasado 20 de marzo, cuando la marea naranja formada por cientos de miles de cazadores llenó el centro de Madrid para reclamar respeto hacia el mundo de la caza. Como se recordó entonces a los gobernantes y políticos, el sector cinegético aporta multitud de beneficios tanto a la economía de las zonas rurales, como al incremento del empleo y a la supervivencia de las sociedades enclavadas en esas regiones de la España vaciada. Sin olvidar, obviamente, las importantísimas labores que realizan en torno al cuidado y la protección del medioambiente.

Desde que el Gobierno dirigido por el PSOE tomó esta decisión el 1 de agosto, la RFEC y todas sus federaciones autonómicas están llevando a cabo una comisión de trabajo para establecer la mejor hoja de ruta a seguir para impedir que el proyecto de ley supere los trámites parlamentarios eludiendo prestar atención a las particularidades de los animales empleados en la caza. Dentro de este plan de acciones, se ha programado un calendario de reivindicaciones y movilizaciones, en las que se protestará con manifestaciones en las calles contra la postura del PSOE, criticando que haya roto sus promesas en torno a la exclusión de la caza del proyecto de ley.

La cita del 1 de agosto, en la que participó el navarro Santos Cerdán, secretario de Organización del PSOE, no es la única ocasión en la que altos cargos de la formación socialista han secundado las reclamaciones de los cazadores. Así, por ejemplo, el portavoz de Agricultura del partido en el Congreso, Juan Francisco Serrano (que también tomó parte en la citada reunión), declaró el 23 de junio en una jornada de bienestar animal que el Gobierno sacaría a los animales empleados en la caza del borrador de la ley. “No podemos comparar un animal auxiliar de la caza, como es el del medio rural, de un animal de compañía, como es el de una ciudad”, pronunció. No obstante, estas palabras quedaron en papel mojado cuando, el 1 de agosto, el Consejo de Ministros aprobó el proyecto de ley sin tener en cuenta las consideraciones del colectivo cinegético. Una acción que incide de nuevo en la deriva anticaza emprendida por algunas de las facciones que forman parte del Gobierno español.

La propuesta de ley no solo cuenta con el rechazo de los cazadores, sino que también se oponen a ella todos los actores del mundo rural, además de colegios veterinarios, científicos, ecologistas y conservacionistas, y asociaciones y actividades unidas en torno a la naturaleza y los animales.

Como primer apoyo, la RFEC ya cuenta con el respaldo de la ONC, que también ha advertido al presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, que saldrá nuevamente a las calles si no se modifica la ley y se retira la reforma del Código Penal planteada en el Consejo de Ministros del día 1 de agosto. A su juicio, los dos textos poseen la marcada ideología anticaza que está imponiendo la navarra Ione Belarra desde su Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030.

La ONC, que aglutina a más de una veintena de asociaciones y organizaciones del sector cinegético español, acusa al PSOE de permitir la deriva animalista a la que Podemos está empujando al Gobierno, supeditando a la mayoría de la sociedad a leyes totalitarias concebidas por minorías. Por tanto, reclama al Ejecutivo que recapacite y que no apruebe una de las leyes más contestadas y rechazadas por la sociedad, expertos y sectores afectados, y que ha recibido ya, además, más de 6.000 alegaciones.

En Navarra ya se excluye a los animales de caza de la ley de mascotas

Tras meses de arduos trabajos publicando estudios sobre los impactos económicos, reuniéndose con las fuerzas políticas, presentando informes técnicos y jurídicos, organizando manifestaciones y un largo etcétera, la Federación Navarra de Caza (FNC) consiguió en junio que el Parlamento de Navarra modificara la Ley Foral 19/2019, del 4 de abril, de Protección de los Animales de Compañía en Navarra. Entre otros cambios, la ley ya no tiene en cuenta en su aplicación ni a la actividad cinegética ni a los animales auxiliares o con una función social o deportiva.

La FNC consiguió el pasado mes de junio que el Parlamento foral modificara la normativa

De este modo, los parlamentarios forales respaldaron las reclamaciones del colectivo cinegético, que llevaba tiempo alertando de que algunas de las normas de la ley eran incompatibles con el carácter esencial de la caza. Asimismo, comprendieron que la función que realizan los cazadores resulta fundamental para una gran diversidad de aspectos, desde la reducción de los daños agrícolas, hasta el control de la expansión de enfermedades animales, sin olvidar su relevante peso en la economía de las zonas rurales, la gestión de las poblaciones animales o la supervivencia de los hábitats naturales.

Para la FNC, este éxito debiera servir de ejemplo para que normativas nacionales como la Ley de Protección, Derechos y Bienestar de los Animales continuaran la senda emprendida por el Parlamento foral y prestaran la debida atención a las reclamaciones de un colectivo formado por cientos de miles de personas que velan por el correcto cuidado del medioambiente.

22/08/2022