La mayoría municipal exige soluciones para Erripagaña

Exigir al alcalde Maya y su equipo de gobierno que elabore los estudios económico-financieros y de dimensionamiento de los servicios públicos necesarios para conocer los efectos que tendría la posible incorporación de Erripagaña a Pamplona-Iruña, ya comprometidos en junio de 2022”.

Este es el principal punto de acuerdo de la declaración que EH Bildu, PSN y Geroa Bai aprobaron ayer en la comisión de Urbanismo, con el voto en contra de Navarra Suma.

Las tres formaciones han denunciado asimismo que el alcalde ha incumplido el compromiso asumido hace cinco meses y que, lejos de asumirlo, ha negado información sobre este tema de forma reiterada a los grupos municipales.

La declaración vuelve a recordarle al equipo de gobierno que el 22 de septiembre de 2021, desde el vecindario de Erripagaña “nos hicieron llegar una comunicación donde se nos instaba a desatascar la situación de paralización que supone la división administrativa del barrio”.

Pasados 18 años de la aprobación del PSIS y ya casi seis años desde que se firmara el convenio marco de colaboración entre Pamplona-Iruña, Burlada-Burlata, Valle de Egüés-Eguesibar y Uharte (2016), es tiempo de enfrentar “las tomas de decisiones precisas para definir su futuro de forma sostenible, estable y definitiva”, sostienen los proponentes.

Así se hizo el 15 de junio de este año, dando respuesta a una declaración presentada por los tres grupos municipales que conforman la mayoría del Ayuntamiento.

En esa jornada el alcalde Maya adquirió el compromiso público de elaborar los estudios necesarios para evaluar la posible integración de Erripagaña en Pamplona, informes económico-financieros y de dimensionamiento de los servicios públicos. Aquel compromiso implicaba un plazo, cuatro meses, incumplido ya por el equipo de gobierno. “Hemos preguntado en dos ocasiones en la Comisión de Urbanismo sobre el tema y no hemos tenido ninguna respuesta ni explicación de si se ha elaborado dicho estudio”, recuerdan los grupos que, con la declaración aprobada, buscan urgir al cumplimiento de lo prometido al barrio.

Sin centro de salud

Los vecinos, por su parte, enviaron un comunicado a los medios de comunicación para denunciar la paralización del proyecto para construir un centro de salud de su barrio. “Esta semana Lezkairu ya va a poder utilizar el centro de salud de su barrio. Mientras tanto, en Erripagaña, barrio desarrollado a la vez, nos quedan varios años para eso. De hecho, hasta el año pasado no se materializó la cesión de la parcela municipal al Gobierno para su construcción, y según información que recogen los presupuestos del año que viene, el gasto no comenzará hasta 2024 y el centro no estará concluido hasta 2026”.

En el comunicado remitido por la asociación vecinal de Erripagaña se asegura que “el diagnóstico está claro: somos un barrio abandonado por las administraciones. Dicen que van a hacer cosas, pero todo se queda en palabras. De viviendas y habitantes ya estamos servidos. ¿Para cuándo las dotaciones y las infraestructuras?”.