La ministra de Hacienda y vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero, ha pedido hoy al magistrado del Tribunal Supremo, Pablo Llarena, que no entre en la legitimidad de la política para legislar, después del auto que emitió ayer en el que criticó la supresión del delito de sedición en el Código Penal y señaló que la reforma realizada por el Gobierno está cercana a la despenalización del 'procés'.
Montero ha comparecido este mediodía ante los periodistas después de la reunión convocada hoy por Pedro Sánchez en Ferraz de la Ejecutiva socialista y de los ministros del PSOE en el Gobierno.
Al ser preguntada por el auto emitido ayer por el magistrado del Tribunal Supremo, la ministra ha afirmado que no iba a entrar en los contenidos "de la misma manera" que piden que cada poder ejerza su responsabilidad: "Nosotros no entramos en los pronunciamientos judiciales y de la misma forma siempre pedimos que tampoco se entre en la legitimidad que tiene la política para el desarrollo de su legislación".
La ministra ha defendido que es "coherente" hacer ese planteamiento porque España es un Estado de derecho en el que la justicia tiene que administrar justicia y los políticos tienen que legislar "conforme a su escala de valores" que, ha añadido, en este caso es el impulso a la convivencia que creen que debe marcar el camino en los próximos años.
Además, y en base al auto de Llarena, que mantiene la acusación del delito de malversación contra Carles Puigdemont, ha acusado al PP y a su presidente, Alberto Núñez Feijóo, de mentir por decir que el expresidente catalán iba a regresar a España con alfombra roja y paseándose con impunidad.
En este sentido, Montero ha señalado que "justamente el auto" de Llarena "pone de manifiesto lo contrario" porque lo que hace, dice la ministra, es reclamar a Puigdemont para que responda ante la Justicia".
De hecho, ha defendido que precisamente la reforma del Código Penal con la "homologación" de la sedición, puede facilitar la extradición del expresidente catalán para que sea juzgado en España y responda ante la justicia por los "gravísimos acontecimientos que sucedieron hace unos años".
Unos hechos, como los referéndums ilegales y la declaración de independencia, además de la fuga de Puigdemont que María Jesús Montero ha recordado que se produjeron durante un gobierno del Partido Popular.
Reproches de Puigdemont
Además, ha añadido que las propias críticas que realiza el exdirigente catalán huido de la Justicia a la reforma del Código Penal "desautorizan" también las acusaciones del PP de que va a regresar con impunidad. Fuentes socialistas añaden incluso, que los reproches de Puigdemont a ERC por la citada reforma en su intervención de anoche reflejan que el 'procés' está acabado.
En cualquier caso, María Jesús Montero ha defendido la reforma que ha realizado el Gobierno del delito de malversación alegando que se sigue manteniendo el reproche penal y han añadido un tipo de malversación que distingue entre quien se enriquece personalmente y quien no destina los recursos públicos al fin al que inicialmente estaban previstos, poniendo como ejemplo que en lugar de dedicarlos a una infraestructura se destinen a pagar salarios.
"Ambos tienen reproche penal pero la intensidad de la pena no se puede hacer homologada", ha exclamado al tiempo que ha alegado que se han "endurecido los delitos de corrupción" por la obligación de los responsables públicos de explicar hasta cinco años después de haber dejado el cargo si se han enriquecido de manera injustificada.
Sin embargo, al ser preguntada por la rebaja de pena que incluyen para los casos en los que el dinero malversado no sea para enriquecimiento personal y sobre si puede garantizar que no se produzcan rebajas de muchas condenas por corrupción, como en Púnica o Acuamed, la ministra no ha respondido.
Se ha limitado a señalar que el caso Acuamed aún no ha sido juzgado y a insistir en que con el nuevo delito se endurecen las conductas penales. De hecho, ha afirmado que ningún miembro de la Ejecutiva ha expresado dudas en la reunión de hoy de que la reforma de este delito pudiera perjudicar al PSOE en las elecciones. Hoy, ha añadido, que se han dedicado a repasar las acciones del Gobierno y se han centrado en ser más eficaces en su discurso electoral.
Política de tierra quemada
Previamente, en su intervención inicial ante los periodistas, la dirigente socialista ha acusado al líder del PP de seguir el "manual de instrucciones del señor Trump o Bolsonaro" y de practicar la misma "política de tierra quemada de las instituciones y también de delirios conspiranoicos que causan un profundo daño a nuestra democracia".
En este sentido, ha afirmado que durante esta semana "ha resonado" el asalto a las instituciones democráticas en Brasil al tiempo que, ha añadido, se ha escuchado a dirigentes del PP y a Feijóo "cuestionar la legitimidad del Gobierno de España y de las instituciones democráticas sembrando dudas incluso sobre la limpieza de las futuras elecciones".
Según Montero, este fue el comienzo que dio el pistoletazo de salida a las políticas trumpistas en EEUU y que luego se replicaron en Brasil. Y siguiendo las comparaciones con el PP, ha asegurado que es triste ver a este partido "atacar la legitimidad de nuestro gobierno democrático alentando dudas sobre nuestra democracia, incluso en Europa, bloqueando las instituciones en beneficio propio, incumpliendo la Constitución y ahora cuestionando la limpieza de las futuras elecciones".
Dicho esto ha preguntado hasta dónde está dispuesto a llegar el PP "en esta deriva tan irresponsable" y ha añadido que en política las palabras "tienen consecuencias". En este sentido, ha añadido que las que se han escuchado hace unos días a Feijóo las han escuchado "previamente en EEUU y en Brasil".
Su conclusión es que el PP de Feijóo "sigue el manual de instrucciones del señor Trump o Bolsonaro". "Esa política de tierra quemada de las instituciones y también de delirios conspiranoicos que causan un profundo daño a nuestra democracia y al bienestar de la mayoría de los ciudadanos", ha añadido al tiempo que ha alertado que se trata de un camino que "no lleva a ningún sitio más que seguir poniendo piedras en el camino para que nuestro país se pueda recuperar de las consecuencias derivadas de la covid y de la crisis".