No hay mejor regalo para empezar el año que ir cumpliendo todo aquello que nos proponemos, haciendo realidad todos nuestros sueños. Y, mientras muchos terminábamos 2024 comiendo las doce uvas para dar la bienvenida a 2025, la navarra Sara Ardanaz, conocida en redes por sus más de 92.000 seguidores como @sara_ardi5, lo hacía ultimando los preparativos para arrancar el 1 de enero con una aventura de 21 días haciendo el Camino de Santiago desde Burgos.
En su perfil de Instagram hemos podido ser testigos de cada paso del camino, de las enseñanzas y aprendizajes que ha compartido con nosotros en el transcurso de esos 21 días en los que la soledad puede ser la mejor de las compañeras. También nos ha hecho partícipes de todas las aventuras que ha vivido en el camino y de la gente que ha conocido mientras avanzaba, y haciendo frente al frío, la lluvia y las inclemencias, nos ha regalado, entre otros, un consejo inmejorable: “El camino es una metáfora de la vida. El primer día me llené la mochila de porsiacasos, y me di cuenta de que estaba llevando pesos que no me corresponden y tuve que dejar cosas por el camino. Es todo una metáfora”, explica, en una enseñanza que solo un viaje físico y emocional como el Camino de Santiago puede ofrecer .
Y es que está acostumbrada a viajar, a vivir experiencias que marcan. Ya antes de echarse a andar hasta Santiago nos había compartido en este pequeño collage de su vida algunos detalles importantes que nos invitan a conocer más en profundidad a esta joven navarra con alma viajera y sonrisa eterna. Y es que se hizo conocida hace ya un tiempo por contar cómo era su vida en Suiza, el país al que viajó y en el que se instaló durante un tiempo. Allí, pudimos descubrir cuánto dinero se gana y cuánto cuestan las cosas más básicas, nos maravillamos con los paisajes más hermosos y también conocimos la “puntualidad suiza”, pues los trenes salen allí justo en el momento en el que está previsto.
Solidaridad
También hemos podido ver su vena más solidaria, y sus grandes conocimientos de idiomas. En el ámbito de la solidaridad hemos podido ver cómo emprendía un voluntariado en Sáhara, ayudaba a las personas afectadas por la DANA en Valencia... Todo con sus habituales consejos optimistas para no perder la energía y la sonrisa, esas ganas eternas de disfrutar de la vida.
Nos hace viajar tanto que podemos hasta enamorarnos de los gatitos que encontramos en cualquier lugar en Estambul y que son más que cariñosos. “El Gobierno (de Turquía) cubre todos los gastos de cuidado y esterilización de los gatos y normalmente los devuelven a la misma dirección porque los vecinos cuidan muchísimo de ellos”, explica la propia Ardanaz, a quien hemos visto hablar en inglés, francés y dariya, la lengua que se habla en Marruecos, un país que nos demuestra en sus vídeos que “es seguro, y también lo es para mujeres que viajamos solas”.
Porque otro de los propósitos de esta joven con alma viajera es desterrar algunos mitos sobre los lugares que visita, mostrarlos tal y como son y compartir con sus seguidores y con el mundo las joyas escondidas que podemos descubrir si nos lanzamos a la aventura de viajar.
Perfil Digital
Risueña. Con su optimismo habitual, las más de 92.000 personas que la siguen en Instagram pueden contagiarse de su optimismo y de su eterna sonrisa. Esta vecina de Caparroso, Navarra, ha conseguido hacerse un hueco en el corazón de todos ellos, que no pierden la oportunidad de seguir sus pasos allá donde va. La han visto en todo este tiempo recorrer Marruecos , hablar de su vida en Suiza y ahora recorrer el Camino de Santiago desde Burgos. Sin embargo, la solidaridad es otra de sus señas de identidad. Y es que ha sido una de las muchas personas voluntarias que se han acercado a Valencia para ayudar a los afectados por la DANA.