La necesidad de abrir la puerta

El Alavés ha dado un acelerón en la puesta a punto del equipo de cara a la próxima temporada tras completar la primera semana de entrenamientos. A las primeras incorporaciones de Alkain y Salva Sevilla se han sumado, en la última semana, las firmas de Benavídez, Sedlar, Anderson Arroyo y Jon Guridi. Cuatro futbolistas que recalan en Vitoria a través de distintas fórmulas, pero que incrementan la polivalencia en las filas de Luis García, especialmente en la retaguardia y la medular.

Ahora bien, la llegada de los últimos futbolistas que, de este modo, puedan cerrar el capítulo de entradas en Mendizorroza, está completamente relacionada con las salidas que se den desde el Paseo de Cervantes. Ya lo advirtió el técnico albiazul cuando apuntó hace unos días en los micrófonos de La SER que, además de concretar “una horquilla de entre 4 y 6 fichajes para conformar una plantilla competitiva y pelear con los mejores”, tienen que salir “en torno a siete jugadores”.

Y es que para que la puerta de entrada se mantenga abierta el destino de una serie de futbolistas se encuentra lejos de Mendizorroza. Una tarea tal vez más ardua que la de incorporar jugadores, ya que encontrar una solución que satisfaga a todas las partes involucradas en la ecuación es tremendamente complejo. Y los precedentes de las últimas temporadas en Vitoria así lo demuestran con las salidas frustradas en varias ventanas como las de Guidetti o Saúl García. Por ello mismo no sería de extrañar que el adiós de los descartes fuese a cuentagotas.

En este sentido, tres futbolistas con contrato en vigor con el Alavés que no realizaron la primera semana de entrenamientos a las órdenes de Luis García son los primeros candidatos para poner punto y final a sus etapas en la capital alavesa. Carlos Isaac, Tachi y Saúl García son los futbolistas que más opciones tienen para abandonar el Glorioso, aunque no por ello sus salidas han de ser fáciles de concretar. Los dos primeros estuvieron cedidos por el Alavés durante la pasada temporada, en la que Isaac tuvo cierto protagonismo en el tramo final del campeonato y, después, el tercero de ellos se mantuvo en dinámica del primer equipo pese a que su participación fuese casi inexistente.

Entre los futbolistas con opciones de abandonar la dinámica de Luis García se encuentran otros jugadores que regresaron a Vitoria tras concluir sus cesiones. Ellos dependen inevitablemente del gusto del técnico babazorro para continuar en las filas albiazules. Taichi Hara, Mamadou Sylla, Borja Sainz, José Luis Rodríguez, Abdallahi y Antonio Perera son los futbolistas que tratarán de aprovechar la pretemporada para hacerse con un hueco en una plantilla que poco a poco incrementa la competencia en demarcaciones como el centro del campo o el carril izquierdo.

En el otro lado de la balanza están los futbolistas que tras consumar el descenso a Segunda disponen de un gran cartel entre los equipos de la máxima categoría. Son futbolistas que por sus propias condiciones pueden asumir un papel clave en una categoría inferior pero cuyos salarios, por contra, pueden ser los más altos del equipo y complicar la tarea de ajustar el límite salarial. Aquí es donde reside un dilema al que se enfrenta la dirección deportiva. Recibir dinero aprovechable para acometer nuevas incorporaciones o mantener en las filas babazorras a jugadores diferenciales como, por ejemplo, Luis Rioja o Fernando Pacheco, quienes evidentemente aportarían un plus de competitividad a una escuadra que arrancará la temporada con la premisa de regresar a la Primera División.

LA VOZ DE SERGIO FERNÁNDEZ

Quien, además del citado Luis García, también ha hablado recientemente sobre la operación salida es Sergio Fernández, al lado de Anderson Arroyo durante su presentación de este martes. En concreto, el secretario leonés se refirió a la necesidad que tiene el club de avanzar en este aspecto: “Es una obligación. Por el número de futbolistas que tenemos en la plantilla, van a tener que salir jugadores que actualmente tenemos con contrato en vigor. Lo importante es mantener el equilibrio entre encontrar acomodo a esos futbolistas y, al mismo tiempo, armar la mejor plantilla posible”.