Un sofá agradable diseña un hogar agradable. A esta conclusión llegó Marisa Tihista, pamplonesa de 52 años, tras pasar mes y medio encerrada en su casa por culpa de la pandemia. “Aprendí a disfrutar en el interior de casa y el sofá es una pieza fundamental, un elemento de descanso muy importante para el bienestar y la calidad de vida”, defiende Marisa, que decidió dar un giro de 180 grados a su vida: abandonó la empresa familiar de suministros industriales tras dos décadas como gerente, visitó ferias nacionales e internacionales “para ver lo último en sofás y butacas” y el 15 de diciembre inaugura Sofás Home en la céntrica Navarro Villoslada de Pamplona. “Siempre he estado vinculada al mundo de la decoración y de los muebles por temas familiares. En la pandemia maduré esta aventura y me he lanzado a pesar de los tiempos que corren. Creo que la tienda va a funcionar porque en Merindades hay un tránsito de público impresionante en comparación con otras zonas de la ciudad. Aunque no he abierto oficialmente, la gente entra, pregunta y se tumba. Ya tengo presupuestos y hasta alguna venta. Estoy muy contenta”, reconoce Marisa.
El establecimiento ofrece una amplia gama de productos según las diferentes formas “de vivir el sofá. No nos sentamos únicamente de cara a la televisión. También hay gente que se coloca a lo indio, que entrecruza los pies, se tumba, se echa, duerme la siesta, lee, trabaja… El sofá es una pieza fundamental del hogar y por eso tiene que estar vivo, se debe adaptar a los distintos usos que le pueda dar cada persona. No vamos a disfrutar si se ha quedado anticuado y no se amolda a nuestra forma de estar en el salón”, insiste Marisa.
El negocio se caracteriza por la versatilidad y cuenta con distintos tipos de productos según los gustos y necesidades: sofás “muy acolchados” para los jóvenes que se pasan la tarde “tirados” en el salón, tapicería antimanchas para los padres que acaban de tener un bebé o telas especiales que evitan los desgarros de las mascotas. Todos estos artículos, destaca, están forrados con pieles cálidas: “Ya no se lleva la textura fría de los cueros”.
El local también ofrece productos para personas con problemas de salud o movilidad. Por ejemplo, butacas o sillones motorizados que colocan las piernas y el corazón a la misma altura. De esta manera, defiende, se mejora la circulación y se minimizan las varices. Estas butacas también se han diseñado para gente que pasa muchas horas de pie en su trabajo.
En la misma línea, dispone de “butacas geriátricas” motorizadas para personas mayores con problemas de movilidad. Las butacas están pensadas para gente que necesita ayuda para ponerse de pie o que le cuesta agacharse porque no puede descargar mucho peso en las rodillas.
Además, la butaca se puede mover por toda la casa porque cabe por todas las puertas, no necesita estar enchufada y cuenta con unas ruedas incorporadas. “Cuando pisas la palanca, la butaca se desbloquea y se empuja con unas asas, como si fuera una silla de ruedas. De esta manera, no tienes que estar cambiando constantemente de sillas”, señala.
También cuentan con una pequeña sección de complementos del hogar: cojines, mesillas, lámparas, mesas de centro, alfombras y colchones .