donostia
– La nueva Oficina de Turismo de Donostia, que se ubicará en la casa consistorial, podrá comenzar sus obras “en semanas”, según señaló ayer el alcalde, Eneko Goia, tras la celebración de la Junta de Gobierno en la que se aprobó adjudicar a la empresa Altuna y Uria la reforma del espacio, ya vacío, para su nuevo destino.
La actuación tiene un presupuesto de casi 1,9 millones de euros, una cifra que ha aumentado notablemente respecto a las previsiones del pasado año a causa de la inflación. El plazo de ejecución de la obra será de ocho semanas, por lo no estará lista antes del verano de 2023. Si las fechas se cumplen, la reforma del espacio del Consistorio podría acabar en agosto, en plena temporada estival, pero luego habría que equipar el interior.
De cualquier modo, la adjudicación de los trabajos supone un paso adelante en los planes municipales de la capital guipuzcoana para tener una Oficina de Turismo en condiciones, en un local de propiedad municipal, lo que le permitirá dejar el del Boulevard, que utiliza en régimen de alquiler.
La Oficina de Turismo del Ayuntamiento se ubicará en 886 metros cuadrados, de los que 651 serán útiles. Se accederá por la fachada lateral del antiguo casino, la que da al Boulevard, bajo el denominado Balcón de Pilatos, donde en el pasado ya hubo una puerta para acceder al edificio.
En este punto habrá una zona de acogida y un ascensor, que llevará a la primera planta. La nueva instalación para atender a los visitantes contará con cinco puestos para ello, además de una zona de estancia, máquinas de información y una tienda.
Una veintena de trabajadores se asentarán en las nuevas dependencias, donde habrá también salas de reuniones y almacenes, según el plan municipal.
donostia y gipuzkoa
La Oficina de Atención Turística de Donostia no solo aportará folletos, datos e ideas a los visitantes que quieran conocer la capital guipuzcoana, sino también para todos lo que deseen acudir al entorno más cercano, como las distintas localidades y puntos de interés de Gipuzkoa. Quedará fusionada así la información de Donostia y Gipuzkoa con el fin de que ambas realidades se enriquezcan mutuamente.
El alcalde recordó ayer que el Ayuntamiento de Donostia y la Diputación de Gipuzkoa acordaron en esta legislatura que “la forma más lógica de atender al territorio era desde Donostia”.
Por su parte, la Diputación optó por reorientar el local turístico que abrió en la esquina de las calles Okendo con Camino, un espacio que ahora tiene como objetivo el trabajo conjunto con las empresas turísticas del territorio y no se dedica a la atención directa a los visitantes, según señaló el regidor jeltzale. l