OCU Euskadi ha denunciado "abusos" en la reserva de comidas y cenas de Navidad y ha advertido que algunos establecimientos imponen restricciones "injustas" en la elección de los platos que pueden encarecer notablemente el precio final de la comida.
Ante el comienzo de la época de celebraciones de comidas y cenas navideñas, la delegación de OCU en Euskadi ha indicado que está detectando situaciones relativas a la elección de los platos que pueden considerarse "abusivas, por cuanto impiden la libre elección del comensal y suelen encarecer el precio que se pagaría normalmente en el establecimiento".
En un comunicado, OCU Euskadi ha denunciado como prácticas "abusivas" la obligatoriedad de escoger un menú, en vez de elegir a carta, la imposición de un menú común para todos, "ignorando las posibles alergias o intolerancias de alguno de los comensales, y el cobro de elevados suplementos entre las alternativas propuestas dentro del menú, entre otras".
OCU Euskadi ha recordado que "no es obligatorio elegir un determinado menú, ya que el establecimiento debería estar preparado para ofrecer los platos que recoge la carta, igual que cualquier otro día del año y al mismo precio". Si finalmente el comensal se decanta por un menú, ha advertido, "conviene pedir la carta para comparar precios, además de comprobar el tipo y número de bebidas incluidas".
Asimismo, aconseja contrastar por escrito con el establecimiento si existe una penalización porque alguno de los comensales no pueda finalmente acudir a la comida, así como pedir que se precise a cuánto ascendería, ya que, según ha indicado, "cobrar todo el importe de un menú resulta igualmente abusivo, al resultar desproporcionada a los costes asumidos por el empresario y supone un enriquecimiento injusto".
La organización ha denunciado también la "práctica indebida de cobrar un plus por reserva", aunque lo que sí se puede hacer es cobrar una cantidad por adelantado como reserva, pero ésta debe descontarse del importe total.
Los otros "abusos"
Otros "abusos", según la OCU, son no ofrecer una carta física del menú; qué falte una referencia en los precios "según mercado" (como un precio por kilo) o que no se avise del precio de un producto fuera de carta; que el precio en carta no incluya el IVA y se quiera luego cobrar; o cobrar por el servicio de mesa o por el cubierto, que es "ilegal" porque "está implícito en el propio servicio de hostelería".
Además, según ha recordado la OCU, el agua del grifo tampoco puede cobrarse, ya que su dispensación es gratuita y obligatoria si el cliente la solicita.
Por último, ha indicado que la decisión de dejar propina es voluntaria y no hay ninguna norma que obligue a los clientes a hacerlo. Tampoco puede rechazarse el pago en efectivo, aunque sí puede rechazarse el pago con tarjeta si se advierte claramente antes de consumir. También es contrario a la normativa que el ticket o la factura de compra no detalle cada uno de los productos consumidos.