La oficina en Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha verificado hasta la fecha un total de 226 ataques contra el sistema sanitario en Ucrania desde que comenzó la guerra, según informó este martes el director regional, Hans Kluge.
"Son casi tres ataques de media por día," indicó Kluge, durante una rueda de prensa en Kiev, y agregó que dos tercios de las agresiones contra sanitarios registradas a escala global en 2022 se han producido en Ucrania. Por el momento, la OMS ha podido confirmar que dichos ataques han dejado al menos 75 muertos y 59 heridos, aunque la oficina para la región europea, que cubre también Rusia y varias exrepúblicas soviéticas, no quiso proporcionar más detalles sobre las víctimas por razones de seguridad.
Kluge, que el lunes visitó instalaciones sanitarias afectadas por el conflicto en la región de Chernígov (norte de Ucrania), aprovechó la ocasión para expresar su "inmenso aprecion y admiración" hacia los profesionales sanitarios ucranianos. "Han mostrado un tremendo coraje y dedicación desde el inicio de la guerra; hacen lo imposible, se mantienen firmes y salvan vidas," aseveró.
El director regional anunció que esta semana se reunirá con representantes del Gobierno ucraniano para obtener más información sobre los retos a los que se enfrenta el país, entre los que citó el acceso a medicamentos por parte de pacientes crónicos. Señaló también la necesidad de reforzar los servicios sanitarios de salud mental, ya que una de cada cinco personas en zona de conflicto desarrollan problemas "serios" en este ámbito, y de apoyar a las supervivientes de violencia y abusos sexuales.
Kluge conminó además a poner la salud "en el centro de los esfuerzos de reconstrucción y recuperación" y puso como ejemplo el problema del suministro eléctrico en hospitales y centros sanitarios. Explicó que la OMS trabaja para proporcionar generadores, pero que a largo plazo el objetivo es avanzar hacia el uso de las energías renovables para garantizar la sostenibilidad del sistema sanitario.
Por su parte, el representante de la OMS en Ucrania, Jarno Habicht, explicó que las infraestructuras sanitarias dañadas por la guerra, entre las que mencionó hospitales, centros de atención primaria y ambulancias, prestaban servicio cada mes a un cuarto de millón de civiles. "Este es el impacto de estos ataques y son ataques que continúan, es inaceptable y no hay razón para ello", afirmó.
Agregó que la OMS ha proporcionado hasta ahora a Ucrania más de 500 toneladas cúbicas de material médico, que incluye medicamentos, equipos para el tratamiento de pacientes, ambulancias y generadores eléctricos.