Los tres grupos de la oposición en el Consistorio donostiarra –EH Bildu, PP y Elkarrekin– analizan estos días las palabras del alcalde, Eneko Goia, y la portavoz socialista, Marisol Garmendia, tras dar a conocer su acuerdo para sostener un tercer gobierno de coalición consecutivo con mayoría absoluta.
El portavoz del primer grupo de la oposición (EH Bildu), Juan Karlos Izagirre, señaló a NOTICIAS DE GIPUZKOA que aún no conocen los detalles del acuerdo “por lo que es imposible valorarlo” y anunció que su formación esperará “los habituales 100 días para hacer una valoración, sobre todo, porque una cosa es lo acordado y otra lo que se hace realmente”.
A pesar de su cautela a la hora de analizar los objetivos señalados en el pacto de gobierno, Izagirre declaró que “en las primeras noticias que recibimos por la prensa ya existen cosas que no compartimos, como la venta del estadio de Anoeta”.
“Por lo demás –añadió– los cambios no parecen responder a una verdadera voluntad de cambiar las cosas en la ciudad, sino a las obligadas por cambios de personas y reparto de responsabilidades habituales en la conformación de un gobierno”.
Izagirre, además, dijo que su formación intuye “unas políticas continuistas con lo hecho estos últimos años, haciendo caso omiso al mensaje enviado por la ciudadanía donostiarra el 28 de mayo”.
Asimismo, añadió que “desde ya, EH liderará las políticas realistas que sí posibilitarán el cambio de rumbo necesario en la ciudad, incidiendo sobre todo en los temas de derecho a la vivienda, turismo sostenible y consenso en la movilidad”.
Por su parte, el portavoz del grupo municipal de Elkarrekin Donostia, Víctor Lasa, manifestó que es “una buena noticia” que se haya conformado ya un gobierno para Donostia, pero dijo temer que sea “más de los mismo” y que parece que se va a hacer “lo que quiere el PNV”.
Para Lasa, “que su socio –en alusión al grupo socialista– haya renunciado a importantes áreas en las que reclamó cambios es decepcionante”. También consideró que el hecho de que el área de Turismo haya pasado a manos nacionalistas, tras haber dependido del grupo socialista, es “reconocer tácitamente que no se han hecho bien las cosas”.
El representante de Elkarrekin Donostia, además, se mostró crítico con algunos objetivos del pacto de gobierno, como el que contempla crear zonas tensionadas para el precio del alquiler, como señala el documento. “Para nosotros debería ser toda la ciudad, porque es la que tiene el metro cuadrado más caro del Estado y de los más caros de Europa”.
También destacó su apoyo a la tasa turística y recalcó que, a pesar de que los grupos municipales del PNV y PSE apoyan su implantación en Donostia, “si los mismos partidos en la Diputación y el Gobierno Vasco están en contra se niega esta posibilidad”.
Por su parte, el portavoz del PP, Borja Corominas, señaló a este periódico que "lo más significativo de la conformación del nuevo gobierno es son problemas que han tenido para conformarlo". Corominas recordó que "el propio el Partido Socialista no votó a favor en la investidura de Eneko Goia, que ha sido su socio de gobierno en los últimos ocho años". "Imagino que porque no confían en su gestión de gobierno, que es es también la suya", opinó el concejal popular. "Que hayan tardado tanto en conformar un gobierno subraya las discrepancias dentro de la coalición y no es bueno para San Sebastián; es tener dos gobiernos en uno, dos partidos enfrentados entre sí, parece parece ser que con dos visiones muy diferentes, según Marisol Garmendia, en temas como la movilidad". "Además, nos extraña que no lo hayan asumida ella o alguien de su partido", agregó. "Creemos que va a ser más de lo mismo. Además de que hay poco entendimiento y poca coordinación interna, lo que que redunda negativamente en los intereses de los doinostiarras", concluyó el corporativo.
Por otra parte, ayer fue convocada para hoy una Junta de Gobierno urgente para ratificar las delegaciones de los concejales que forman parte del Ejecutivo, dadas a conocer el pasado martes.