La llegada de inmigrantes a Euskadi en 2020, el año marcado por la pandemia de la covid, se redujo un 32,7 % respecto del ejercicio anterior, mientras que las emigraciones solo disminuyeron un 6,5 %.
Esta evolución hizo que el saldo migratorio en Euskadi siguiera siendo positivo como en años anteriores, pero tan solo en 4.512 personas. Los saldos migratorios de los tres últimos años alcanzaron las 10.725 personas en 2017, 14.724 en 2018 y 19.468 en 2019.
Durante el año pasado se registraron 35.221 inmigraciones frente a las 52.306 que tuvieron lugar en 2019, lo que supone el citado descenso del 32,7 %.
Por su parte, el número de emigraciones también sufrió un descenso en 2020 respecto del año anterior, aunque no tan significativo, ya que se dieron 30.709 emigraciones, un 6,5 % menos que las 32.838 contabilizadas en 2019.
Gipuzkoa, que ganó 2.130 personas, fue el territorio que presentó el saldo migratorio más elevado en cifras absolutas, Bizkaia tuvo un saldo positivo de 1.583 personas y Álava de 799, aunque en términos relativos, Bizkaia ofrece el descenso más acusado respecto del año anterior, con un saldo migratorio un 85,9 % menor, seguido de Álava con un descenso del 72,1 % y de Gipuzkoa con uno del 60,5 %.
En las capitales, el saldo migratorio fue negativo en Bilbao (-1.029 personas) y en Vitoria-Gasteiz (-163), pero Donostia tuvo un saldo positivo de 802 personas, ha informado este miércoles el Instituto Vasco de Estadística-Eustat.
Atendiendo a los movimientos migratorios con las distintas comunidades autónomas, Euskadi mantuvo un saldo migratorio positivo con la mitad de ellas. Las que más saldo aportaron fueron Madrid (654 personas), Cataluña (312 personas) y Andalucía (264 personas).
Por otra parte, el saldo en 2020 con otros países, aunque positivo (5.245 personas), fue significativamente menor que el resultante en 2019 (18.133 personas).
En 2020 un total de 16.942 inmigraciones provinieron del extranjero, lo cual supone un descenso del 45 % respecto a las 30.821 de 2019. Y en lo referente a las emigraciones, un total de 11.697 tuvieron por destino el extranjero, frente a las 12.688 de 2019, un 7,8 % menos.
La movilidad geográfica extracomunitaria afectó durante 2020 a 30 de cada 1.000 habitantes de Euskadi, una tasa 5 puntos inferior a la del conjunto de comunidades autónomas. Por territorios, Álava llegó al 34,6 â, Bizkaia se situó en el 29 â y Gipuzkoa en el 29,5 por 1.000.
Por otro lado, las comunidades autónomas que constituyeron polo de atracción para vecinos de Euskadi fueron, por este orden, Cantabria, Castilla y León, Navarra y Galicia, ya que estas cuatro acogieron a más del 90 % de las personas que dejaron la CAV.
En conjunto, en 2020 el saldo negativo con las comunidades autónomas fue superior a 2.600 personas, frente al saldo negativo de 150 personas en 2019.
Respecto a las personas de nacionalidad extranjera, las inmigraciones fueron 20.955 en el año 2020. De ellas, 6.433 llegaron a Euskadi desde otras comunidades autónomas, principalmente desde Madrid, Cataluña y Andalucía, y otras 14.522 directamente del extranjero.
Por su parte, se contabilizaron 13.193 emigraciones de personas extranjeras, lo que supuso el 43 % del total, con un 64 % con destino a algún país extranjero. De esta forma, el saldo de personas extranjeras fue positivo en 7.762.
Además, durante el año pasado se contabilizaron 205.575 cambios de residencia habitual en Euskadi, por lo que un 9,3 % de la población vasca realizó algún cambio. Del total, 139.645 se produjeron dentro de la comunidad autónoma (68 %) y 88.891 movimientos fueron cambios de domicilio dentro del mismo municipio.