La pastelería de Bilbao que enamora a 'Cenando con Pablo' con sus croissants artesanos: "¡Es increíble!"

En el corazón de Bilbao, existe un lugar que ha logrado conquistar los paladares más exigentes con sus croissants artesanales y dulces innovadores: Patxes, una pastelería que se ha convertido en parada obligatoria para los amantes del dulce.

El conocido youtuber gastronómico 'Cenando con Pablo' visitó este establecimiento y quedó maravillado por la calidad y creatividad de sus productos, dedicándoles un vídeo en el que no escatimó elogios. Desde croissants de pistacho hasta originales híbridos de cookie y croissant, la experiencia en Patxes promete ser inolvidable.

Un obrador artesanal y productos únicos

En su vídeo, Pablo destaca que todos los productos de Patxes son elaborados en su propio obrador. Este detalle garantiza la frescura y autenticidad de cada bocado, desde los famosos croissants hasta los New York rolls, donuts y palmeras. La filosofía de la pastelería es clara: apostar por ingredientes de alta calidad, muchos de ellos locales, complementados por una mantequilla francesa que les aporta ese toque especial que tanto elogia el crítico gastronómico.

El croissant de pistacho, uno de los productos más demandados, dejó a Pablo sin palabras. "Jesucristo de mi vida", exclamó al probarlo, destacando su doble textura, con una masa hojaldrada perfecta, un glaseado de pistacho y una cremosa capa interior. A pesar de no considerarse un gran amante del pistacho, confesó que este croissant logró conquistarlo.

Dulces para todos los gustos

La oferta de Patxes va mucho más allá de los croissants clásicos. Pablo quedó fascinado por la variedad de opciones, incluyendo los sabores innovadores como el croissant de cheesecake, con una mousse ligera que recuerda al queso crema, o la crookie, un híbrido entre cookie y croissant que combina los sabores de Kinder y Lotus. Cada creación refleja el compromiso de la pastelería por ofrecer algo único y de calidad.

Otro de los productos destacados en su visita fue el Flan Parisien, descrito por el youtuber como una auténtica "locura". Este postre, con su textura cremosa de vainilla bourbon y hojaldre crujiente, le pareció una obra maestra de la repostería. Según Pablo, la mantequilla utilizada en Patxes "no es una cualquiera", un detalle que marca la diferencia en cada bocado.

Innovación y tradición en constante evolución

Patxes no se queda en los clásicos. Sus creaciones cambian según la temporada, sorprendiendo a los clientes con nuevas propuestas. Durante el verano, el croissant Malibú Party, con sabores tropicales de coco, vainilla y compota de piña, fue un éxito. En otoño, el croissant bautizado como "Otoño" hace las delicias de los bilbaínos con su mousse de chocolate, praliné de avellana y decoraciones de chocolate bañadas en bronce.

Por si esto fuera poco, también ofrecen los famosos New York rolls en distintas variedades, como el de brownie que Pablo probó, y una amplia selección de donuts, palmeras y napolitanas. Para quienes buscan algo exclusivo, los Patxekitos, un hojaldre caramelizado al horno, son perfectos y pueden encargarse con antelación.

Una experiencia que trasciende el sabor

La experiencia en Patxes no solo conquista por el sabor, sino también por la atmósfera acogedora y la atención al detalle. Aunque la pastelería ofrece un servicio principalmente take away, dispone de dos mesitas exteriores donde los clientes pueden disfrutar de sus productos recién hechos. La popularidad del establecimiento es tal que muchos de sus productos se agotan rápidamente, por lo que hacer un encargo con antelación es una estrategia recomendada.

Pablo no dejó de destacar la dedicación del equipo de Patxes y su capacidad para sorprender a los clientes con cada creación. "Aquí no paro de querer probar cosas nuevas", afirmó, reflejando la sensación de entusiasmo que genera este rincón dulce de Bilbao.

La pastelería que revoluciona el dulce en Bilbao

Con su obrador artesanal, ingredientes de primera calidad y una creatividad desbordante, Patxes ha logrado posicionarse como una referencia en la repostería bilbaína. Su capacidad para combinar tradición e innovación, ofreciendo tanto productos clásicos como creaciones originales, ha conquistado a los clientes locales y a críticos como 'Cenando con Pablo'.

Si algo queda claro tras la visita de Pablo, es que Patxes no es solo una pastelería, sino un destino donde el dulce adquiere una nueva dimensión. Como él mismo dijo, "si vienes aquí, el dulce te gusta más. Es matemático". Una frase que resume la magia de este lugar que, sin duda, seguirá dando mucho que hablar.