Desde la remodelación de Anoeta es la peor entrada a un partido de la Real Sociedad. El encuentro contra el Villarreal de ayer venía precedido por un horario absolutamente infame, en un día laboral como es el lunes fuera de la lógica y con una contestación importante por parte de los aficionados txuri urdin, que no le encontraban por ningún lado la justificación.
Además, la noche era muy fría lo que acabó por dejar en un total de 20.855, según los datos oficiales ofrecidos por el club, los espectadores que asistieron al Reale Arena. Se veía venir que iba a ser la peor entrada de la época moderna de Anoeta y lo fue. Lejos, por otra parte, de la media de asistencia esta temporada que hasta ayer era de 33.812 espectadores.
Hay que tener en cuenta que en apenas tres días la Real volverá a jugar en el mismo escenario, en este caso contra el Rayo Vallecano en los octavos de final de la Copa del Rey.