Navarra

La planta de compostaje construida en Sakana permitirá tratar hasta 1.000 toneladas de residuos al año

Un momento de la visita.

El consejero de Cohesión Territorial y el presidente de la Mancomunidad de Sakana han visitado en Arbizu la nueva instalación, que ha contado con una inversión de 620.000 euros por parte del Gobierno de Navarra

El consejero de Cohesión Territorial del Gobierno de Navarra y presidente del Consorcio de Residuos, Bernardo Ciriza, y el presidente de la Mancomunidad de Sakana, David Oroz, han visitado este jueves la nueva planta de compostaje de Sakana, que cuenta con capacidad para tratar hasta 1.000 toneladas de residuos al año y evitará que deban ser transportadas 100 kilómetros hasta la planta de biogás de Caparroso para su tratamiento.

La instalación construida en Arbizu, que dará servicio a una treintena de localidades de las mancomunidades de Sakana y Mendialdea, ha contado con un presupuesto de cerca de 800.000 euros, IVA excluido, financiado por el Gobierno de Navarra a través del Plan de Inversiones Locales con 620.000 euros, y una aportación restante a cargo del Consorcio de Residuos de Navarra de 76.000 euros y del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico de 95.000 euros.

En la visita, el consejero y el presidente de la Mancomunidad han estado acompañados por el director general de Administración Local y Despoblación, Jesús Mª Rodríguez, el gerente de NILSA, Fernando Mendoza, y representantes del resto de mancomunidades que integran el Consorcio de Residuos de Navarra. Durante la visita, han recorrido la instalación, que inició su funcionamiento antes de verano, así como el tratamiento que se realiza para transformar la materia orgánica en compost para su empleo como sustrato.

La nueva planta se ubica en el paraje de Utzubar, en un terreno de 14.000 metros cuadrados junto al vertedero de Arbizu. Consta de un edificio cubierto de planta rectangular de 25,20 metros de ancho y 100 metros de longitud, con una superficie construida de 2.520 m2.

La materia orgánica pasa por varias fases para su tratamiento en la nueva planta. Tras la descarga, se procede a la retirada superficial de los elementos impropios que hayan podido arrojarse a esta fracción, se procesa con máquinas abrebolsas y trituradoras, y se mezcla con material estructurante que proviene de la trituración de podas. La fase de descomposición se realiza en pilas de sección trapezoidal de materia orgánica a temperaturas entre 55 y 70 grados, en la que se realizan periódicamente volteos y aireaciones, para dar lugar después a una etapa de maduración.

Una vez madurado, el compost se criba y se traslada en camión a la planta de transferencia, donde se acopia el producto final para su uso como sustrato. Este compost se ofrece de manera gratuita a tres sectores de la Mancomunidad de Sakana: usuarios domésticos del servicio de residuos, ayuntamientos, y agricultores y ganaderos. En 2020 se repartieron 200.000 kilos de compost entre 750 vecinos y vecinas de la comarca.

La Mancomunidad de la Sakana se encarga de recoger los residuos urbanos de más de 30 localidades de la zona: Aizkorbe, Alsasua, Arbizu, Arruazu, Bakaiku, Torrano, Egiarreta, Ekai, Errotz, Etxarren, Etxarri Aranatz, Etxeberri, Villanueva, Ihabar, Irañeta, Irurtzun, Iturmendi, Izurdiaga, Lakuntza, Lizarraga, Lizarragabengoa, Murgindueta, Olazagutía, Satrustegi, Uharte Arakil, Unanu, Urdiain, Urritzola, Ziordia y Zuhatzu.

17/09/2021