La planta de hidrógeno verde de Tudela arrancará con 2,8 millones de fondos europeos

La planta de hidrógeno verde de la Ciudad Agroalimentaria de Tudela (CAT) se ha asegurado la financiación pública necesaria para su puesta en marcha. El proyecto recibirá 2,8 millones de euros procedentes de los fondos europeos Next Generation que servirán para hacer viable una iniciativa pionera y que permitirá abastecer de electricidad tanto a la CAT como a otras empresas de la Ribera de Navarra

El IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía de España), dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica, ha confirmado que concede el montante necesario para construir durante los próximos tres años la instalación, cuya potencia rondará los tres megavatios en una primera fase y que se triplicarán, hasta los diez, en una segunda. La inversión total rondará los nueve millones de euros, de los que tres serán aportados por el sector privado, otros tres por la Ciudad Agroalimentaria de Tudela y casi tres más procederán de fondos europeos.

La instalación debería estar operativa en 2026 y supondrá, según el Gobierno de Navarra, un ejemplo de cómo el sector público, como ya hizo en otros momentos históricos, impulsa una nueva tecnología o sector económico emergente. En este caso, el hidrógeno verde está llamado a facilitar el almacenamiento de electricidad procedente de energías renovables, asegurando de este modo un suministro estable y limpio.

Según la memoria del proyecto, el hidrógeno producido en la planta GreenH2CATudela tendrá como principal consumidor la Central de Infraestructuras Comunes (CIC) de la CAT, mediante la sustitución parcial del consumo de gas natural de su instalación de trigeneración. El hidrógeno industrial suministrado a la CIC sustituirá inicialmente el 5% del consumo de gas natural total de la central, si bien se confía en sustituir finalmente el 15% del consumo de gas, unos 185 gigavatios hora al año.

El hidrógeno verde que se genere en Tudela podrá ser empleado por empresas industriales navarras grandes consumidoras de energía y que en estos momentos ya emplean hidrógeno gris, procedente de energías emiten CO₂. Entre ellas se encuentra Guardian Glass4 (Tudela), que ya ha mostrado interés y que se encuentra a ocho km por carretera desde la futura instalación de producción en la CAT. En su caso, el hidrógeno se emplea como materia prima en vez de como vector energético. Este hidrógeno se encarga de generar una atmósfera protectora en el proceso productivo para limitar las pérdidas materiales y energéticas por oxidación del producto.

Además Guardian Glass ha manifestado su interés en poder consumir el oxígeno producido en la electrólisis del agua”, se explica en el proyecto, que cifra en 36 toneladas de hidrógeno por año el consumo de la empresa tudelana. Mucho más distante de la instalación se encuentra ArcelorMittal (Lesaka), que consume 17 toneladas por año.