La poca clase de Vinicius en la expulsión de David García

Al madridista Vinicius le han envalentonado tanto en la campaña mediática a su favor, que ahora el extremo brasileño quizás se cree que tiene licencia para todo. El jugador merengue, que contra Osasuna hizo su habitual encuentro hiperactivo pero con poco tino y mucha murga debido en gran parte al ejercicio coral de ayudas en banda de Nacho Vidal y Unai García, realizó ayer un par de gestos de desconsideración en el encuentro en el Santiago Bernabéu que no hablan muy bien de su deportividad.

Vinicus conoce poco del fair play del que tanto se llenan la boca por la capital cuando al extremo le cosen a patadas. Primero, acompañado de Carvajal, escoltó a Cuadra Fernández para que el árbitro revisara la acción del penalti de David García a Benzema. Una vez que el colegiado ya tenía clara la decisión, la del penalti y la roja directa, Vinicius agitó varias veces la mano en tono despreciativo, simulando hacia el defensa rojillo el gesto de que se marchara a los vestuarios. El árbitro interpretó que la jugada que originó el penalti a Benzema se trataba de una ocasión clara de gol y que García era el último zaguero navarro, por lo que decretó la expulsión del de Ibero. Por cierto, David García será por tanto baja obligada en el partido contra el Valencia y además seguirá con cuatro cartulinas amarillas acumuladas.

La imagen no ha pasado por alto en las redes sociales ante la poca clase demostrada por el jugador blanco, más teniendo en cuenta que le fue concedido un gol en fuera de juego que tenía que haber sido anulado y cuando en otro lance del partido el jugador madridista parece dirigirse al árbitro con la expresión "eres malísimo".

Pero el recital de mofas de Vinicius no terminó ahí. A continuación de la expulsión, cuando su compañero Benzema se disponía a chutar la pena máxima ante Sergio Herrera, Vinicius levantó los brazos desde la frontal del área. El brasileño daba por hecho el gol y parece que se quería anticipar a la celebración. No contó con la fabulosa puesta en escena del portero de Osasuna cada vez que se enfrenta a un penal y que tiene como lanzador a Benzema, que ha fallado tres penaltis de forma consecutiva ante el guardameta rojillo.