La Policía Municipal de Bilbao dará comienzo hoy lunes a una nueva campaña que, durante toda la semana, controlará que los conductores no utilicen el móvil u otros dispositivos electrónicos, como navegadores GPS, cuando se encuentran al volante.
El uso de este tipo de dispositivo resultan peligroso para la conducción, ya que se ha comprobado que cuando una persona habla por el móvil mientras conduce deja de identificar el 40% de las señales e indicaciones de tráfico, su velocidad media baja un 12% y su poder de reacción disminuye ante cualquier imprevisto. Además, el riesgo no solamente radica en hablar por el móvil, sino también en comprobar quién llama, leer y enviar mensajes, o utilizar aplicaciones, ya que son incompatibles con la atención que requiere la conducción. La misma circunstancia de peligro se produce cuando se conduce y se utilizan auriculares conectados a receptores o reproductores de sonido. Y todo esto es de aplicación igualmente a las personas que conducen bicicletas o vehículos de movilidad personal como los patinetes eléctricos.
Durante el año pasado, en campañas similares, la Policía Municipal de Bilbao controló un total de 10.244 vehículos y sancionó a 162 personas, 138 de ellas por uso del móvil y las 24 restantes por otras infracciones.
Además, desde el 21 de marzo, el uso del móvil, sujetándolo con la mano, se castiga con la retirada de seis puntos, mientras que si conduciendo vehículos en los que el uso del casco es obligatorio, el teléfono se coloca entre este y la cabeza, se retraen tres puntos.