La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, insinuó este domingo que su país, que mantiene al rey Carlos III como jefe de Estado, se convertirá previsiblemente en una república a lo largo de su vida, aunque anticipa que el cambio será un proceso lento y aseguró que ella no lo instigará.
Ardern, que está en Londres para asistir este lunes al funeral de Estado por Isabel II, ya había sostenido en el pasado que Nueva Zelanda cambiará probablemente de forma de Gobierno en las próximas décadas.
"Usted dice que es inevitable que Nueva Zelanda se convierta en una república durante sus años de vida, ¿por qué?", le cuestionó una periodista de la BBC a la primera ministra.
"Creo que hasta la misma reina (Isabel II) observó y admitió la evolución de nuestras relaciones a lo largo del tiempo", afirmó Ardern. "Mi observación es que continuará habiendo una evolución en nuestras relaciones. No creo que vaya a ocurrir de manera rápida, ni pronto, pero ocurrirá durante mi vida", agregó.
La jefa de Gobierno subrayó que el sistema político neozelandés se basa en "complejos acuerdos", que incluyen tratados entre los indígenas maoríes y la Corona británica.
"Por ese motivo, no es un proceso que yo tenga ninguna intención de instigar. Pero si ocurre, y cuando ocurra, llevará su tiempo y será necesario hacerlo con mucho cuidado", agregó.
La primera ministra fue asimismo cuestionada sobre el "debilitamiento" de los lazos entre los países de la Commonwealth, después de que Barbados se independizó de la Corona británica el pasado año.
"Yo soy una observadora de ese proceso, será una cuestión de cada líder en cada país determinar su propia trayectoria", reflexionó.
"Esto es una evolución. Lo que es importante es que se mantendrán lazos entre nosotros como Mancomunidad de Naciones, porque hay todavía cosas que ganar gracias a esa relación", agregó.