Desde la cancelación, por su pésima audiencia, de Ya son las ocho, Sálvame ha vuelto a extenderse hasta las 21.00 horas, hasta que comienza el informativo nocturno, como ya sucedió cuando Telecinco perdió los derechos de Pasapalabra. Lo hace con una hora más de programa llamada Sálvame Sandía y eso ha provocado que retornen las inclasificables transiciones que ya hubo en su día.
Porque no es que acabe Sálvame, haya anuncios o una sintonía y empiece el informativo, sino que desde el programa del corazón se da paso directamente (para intentar retener al público) a Pedro Piqueras, que ya hace cosa de un año veía cómo tenía que comenzar el noticiario directamente desde una fiesta, un baile, unos gritos o dándole paso Raquel Mosquera, algo que evidentemente resta seriedad y credibilidad. Y se notaba en su expresión de incredulidad, hartazgo o pena.
Pues con el alargue de Sálvame, estos días quien ha dado paso al veterano periodista ha sido Terelu Campos, presentadora suplente de Jorge Javier Vázquez. Todos los días se está produciendo una situación bastante surrealista, pero el miércoles se llevó la palma. Terelu compartió pantalla con Piqueras durante unos instantes segundos después de que su hermana, Carmen Borrego, se duchara en pantalla emulando cómo acababa el mítico programa ¿Qué apostamos?
Mientras tanto, la cara de Piqueras mostraba una indisimulada resignación. De hecho, miraba hacia abajo y ni siquiera se dirigió a Terelu. Unas imágenes que se hicieron rápidamente virales en las redes sociales.