Reala

La Real ante la presión del Athletic: errores y mejoría... abortada

El cuadro txuri-urdin supo generar sus dos ocasiones durante la media hora central del derbi, tras sufrir de inicio y antes de perder empuje con los cambios de Kubo y Barrene
Captura de pantalla correspondiente al partido de este domingo en San Mamés. / MOVISTAR

La Real Sociedad perdió este domingo frente al Athletic el derbi de San Mamés, un partido igualado en líneas generales que los rojiblancos merecieron vencer gracias a su superioridad inicial. El cuadro txuri-urdin logró contrarrestar gran parte del potencial ofensivo de un adversario que en su estadio acostumbra a producir mucho más en ataque. Sin embargo, los de Imanol, a quienes no les faltó actitud ni predisposición, sí se vieron desnaturalizados (una vez más en Bilbao) por el gran trabajo en la presión del conjunto local. Según el modo en que los blanquiazules encararon esa misma presión, el encuentro puede dividirse en tres fases distintas.

El arranque

El Athletic no sorprendió con el modo en que apretó a la Real. Lo hizo mediante el clásico 4-4-2 que dibuja en fase defensiva con el salto a primera línea del mediapunta Sancet. Se trata, eso sí, de un dibujo traicionero para rivales como el txuri-urdin, pues implica en la teoría una superioridad numérica por dentro (tres centrocampistas contra dos) que no es tal en la práctica. Al fin y al cabo, uno de los dos puntas trabajaba casi siempre sobre Zubimendi, este domingo. Y ahí estaban también las ayudas interiores de los hermanos Williams desde los extremos, las vigilancias de los laterales e incluso los saltos a la presión del central que no tenía marca. La sala de máquinas era un campo de minas...

Ante un rival que presionaba de forma agresiva, hacia delante, la Real contaba con tres vías posibles de ataque. La directa y profunda, con balones largos a la espalda de la adelantada zaga local, quedó directamente desactivada por la no alineación de Sheraldo Becker, quizás el único futbolista del plantel (junto al lesionado Óskarsson) capaz de sostener una carrera larga y a campo abierto ante un zaguero rival. Condenado así a progresar mediante la combinación en corto, el cuadro txuri-urdin tuvo que elegir entre la vía interior y la exterior... Como no asistimos a la charla táctica de Imanol en la previa del encuentro, no sabemos a ciencia cierta por qué caminó apostó. Pero sorprendió que su equipo intentara con cierta insistencia buscar avanzar por dentro, con Zubimendi como trecer hombre.

El decisivo gol del Athletic llegó segundos después de una posesión txuri-urdin que la Real gestionó mediante una salida de tres, incrustando a Zubimendi entre centrales. El pivote blanquiazul, con la zurda y algo mal perfilado, buscó un pase interior directo para Barrene, viendo que De Marcos comenzaba a salir fuera a por un Javi López libre de marca (Williams había tenido que saltar a por Aguerd). Sin embargo, tanto el propio De Marcos como Vivian llegaron con tiempo para cortar el balón y despejar, generando un segundo rechace de Aguerd (saque de banda) que dio origen al 1-0. Los txuri-urdin seguían metiendo balones por dentro pese a que la vía exterior se erigía como muy buena alternativa.

La segunda media hora

Ya en desventaja en el marcador, la Real dotó de otro poso a su juego, mediante decisiones más acertadas sobre el césped. Los de Imanol comenzaron a salir por fuera utilizando un circuito de pases que iba de central a lateral y de lateral a extremo. Los blanquiazules al menos conseguían así ganar metros y acercarse algo a la meta de Julen Agirrezabala...

La Real comienza a encontrar uno de los beneficios que implica jugar con los extremos a pierna cambiada. Kubo y Barrene pueden recibir e iniciar un movimiento interior, no necesariamente destinado a portería y sí a buscar zonas desde las que puedan lanzar el esférico a la banda contraria.

Durante el tramo inicial de la segunda parte, la Real siguió buscando este tipo de situaciones, y así logró generar la gran oportunidad de Martin Zubimendi, en una jugada muy similar a la ya estudiada. Kubo fue el encargado de iniciar estas ofensivas, aunque Barrene también trato de protagonizar alguna arrancada a la inversa desde su banda.

Media hora final

En el minuto 60, Imanol dio un golpe de timón al encuentro sentando en el banquillo a los dos extremos y apostando por jugar en las bandas con Becker y Sergio Gómez, ambos a pierna natural. La mejoría en ataque del cuadro txuri-urdin se vio así abortada, ya que los perfiles de los nuevos atacantes de banda impedían desarrollar los movimientos que habían generado las dos ocasiones previas. El encuentro consumió su última media hora sin que nada sucediera en el área del Athletic, y con los rojiblancos consumando una victoria de la que resultaron acreedores: no fue ni mucho menos un K.O., pero a los puntos sí se mostraron superiores dentro de un derbi equilibrado.

Etiquetas
26/11/2024