La oposición del Ayuntamiento, encabezada por PNV y PSE-EE, mostró ayer su malestar con el anteproyecto del nuevo mercado de abastos presentado por el equipo de gobierno, liderado por EH Bildu y Herriaren Eskubidea. Para los jeltzales la rehabilitación de la plaza del mercado “siempre” ha sido una de sus “prioridades” y ha trabajado “para que sea una realidad realizando enmiendas a los presupuestos y haciendo aportaciones a través del grupo de trabajo Durango Helburu”. No obstante, “una vez más vemos cómo el equipo de gobierno hace caso omiso de las aportaciones planteadas para mejorar el proyecto y se limita a presentar uno realizado por una empresa que, a juzgar por la presentación, ni siquiera conoce la realidad de Durango”, criticó la portavoz jeltzale Mireia Elkoroiribe.
Desde el PNV propusieron convertir la plaza del mercado en un espacio abierto que sirva de paso y con diferentes zonas para garantizar una dinamización continua y constante con el propósito de atraer a la gente, en contraposición a lo planteado con espacios cerrados con escasas entradas. “Solicitamos poder contrastar el primer anteproyecto presentado y definir con los diferentes agentes el modelo de plaza que queremos para Durango, pero ni siquiera se ha dado respuesta a las aportaciones realizadas y la participación se ha limitado a las entrevistas realizadas con algunos agentes en el 2020 y a dos reuniones en las que se han limitado a presentar sus anteproyectos”, lamentó Elkoroiribe.
Fue el pasado miércoles cuando se dio a conocer la segunda fase del anteproyecto que para la mayoría de los asistentes, entre los que se encontraban políticos y representantes de asociaciones y agentes implicados en el proyecto, “resultó decepcionante porque una vez más el proyecto no responde a las necesidades de Durango. Se nos ha presentado un pupurrí de espacios y elementos bastante alejado de la realidad. La plaza del mercado merece un proyecto bien trabajado que sirva para la dinamización y revitalización del casco viejo, algo que en este proyecto ni se menciona, además de no responder a las necesidades de los baserritarras ni de otros colectivos”, lamentaron desde el PNV.
Los jeltzales insistieron en el trabajo realizado esta legislatura para la dinamización de la plaza con talleres, así como en su rehabilitación mediante enmiendas acordadas con el equipo de gobierno y aportaciones trabajadas con Durango Helburu. “Ahora vemos que al igual que otros proyectos que son estratégicos nuevamente este equipo de gobierno al que se le llena la boca con la participación presenta un proyecto sin contar con nadie, lo cual nos parece muy grave. Más aún sabiendo que la redacción se ha realizado unilateralmente y sin contar con nadie”, recalcó Elkoroiribe.
En esta línea se mostró también el PSE-EE muy descontento con el anteproyecto y las formas de llevar cabo el proceso. En opinión de Jesica Ruiz, “si de verdad lo que se busca es mantener la esencia de la plaza es imprescindible una visión completa del edificio y no hacer dos espacios diferenciados. En lo que al coste se refiere, el grupo socialista cuestiona la intenciones del equipo de gobierno. “Este anteproyecto ha supuesto 80.000 euros y un presupuesto estimado de más de 5 millones de euros por lo que, con estos datos, los 265.000 euros para el proyecto que se proponen en los presupuestos de 2023 serán insuficientes”, zanjó Ruiz.