¿Qué pasó por su cabeza cuando recibió la propuesta de ser vicelehendakari primera y consejera de Cultura y Política lingüística?
Sorpresa, mucho agradecimiento, mucha ilusión… y hasta ahí.
¿Cuánto le costó decidirse?
No demasiado.
¿Cuál va a ser su papel como vicelehendakari primera?
Es una figura en la que el lehendakari puede descansar las responsabilidades o compromisos que él desee o que no pueda atender. También me puede encargar determinadas encomiendas o proyectos, y en cualquier caso, yo estoy a su disposición para todo lo que él necesite.
“ En el pacto de país por la sanidad se verá la altura de miras de los partidos para lograr un objetivo necesario ”
Con un perfil también político que, como va a ser el caso en esta entrevista, le va a hacer opinar sobre cuestiones políticas…
Bueno, lo iremos viendo. Yo voy a estar muy centrada en sacar adelante los proyectos en el ámbito de la cultura, en el ámbito del euskera y en el ámbito del deporte. Y luego, en aquellas cuestiones que el lehendakari valore que yo pueda aportar, sean políticas o sean de gestión.
¿Cómo van estos primeros días? Han cogido pronto velocidad de crucero.
Están siendo muy intensos. El lehendakari nos ha pedido que trabajemos mucho. Nos ha pedido también más cosas, pero ha incidido en que no podemos parar. No va a importar que sea julio, no va a importar que sea agosto; vamos a seguir trabajando mucho.
Un gobierno con quince departamentos. Hay que hacer un esfuerzo de coordinación.
Sí, lo que pasa es que cuando el país necesita retos concretos y personas dedicadas a algunos de esos retos, probablemente la coordinación sea fácil porque las tareas y los roles están bien definidos. Cada uno sabemos a lo que nos tenemos que dedicar en ese estilo de gobernanza que compartimos los compañeros con el lehendakari al frente.
“ Somos un gobierno que tenemos muy claro que no podemos hacer las cosas solos. Necesitamos a otros ”
Es eminentemente técnico, si miramos los perfiles. ¿Es algo buscado?
Quien conozca al lehendakari Pradales sabe que no deja las cosas al azar, sabe que medita mucho los pasos que tiene que dar, los razona y toma las decisiones porque ha hecho un análisis exhaustivo. Así que creo que esta decisión ha sido meditada y buscada.
Sabe que no le van a conceder los famosos cien días de cortesía…
En política hay que aceptar las cosas como vengan. No vamos a estar pendientes de los cien días. Desde el primer momento nos vamos a poner a trabajar, a dar respuesta a la agenda que el lehendakari nos ha puesto encima de la mesa. Y el lehendakari nos ha puesto a todas las consejeras y consejeros una triple agenda para el país. Es una agenda del bienestar; los ciudadanos vascos necesitan bienestar físico, emocional y económico. Es una agenda global; Euskadi tiene que trascender al mundo que está más allá de sus fronteras y tiene que tener permeabilidad para trasladar al mundo quiénes somo y, a la vez recibir los inputs de otros lugares. Y luego, una agenda humanista.
¿Qué espera de la ronda de contactos? ¿Es posible que sea algo más que trámite o protocolo?
Eso lo decidirán los partidos que vayan. Creo que el lehendakari ha empezado a hacer, a su nivel, lo que nos ha pedido a nosotros, que es escuchar las propuestas que otras y otros le quieran aportar. Somos un gobierno que tenemos claro que no podemos hacer las cosas solos. Y por supuesto que los partidos políticos y los agentes sociales son una parte indispensable junto con la sociedad civil para sacar un país adelante.
“ En Euskadi la política trata de buscar el bien común y no el descrédito. Apostamos por lo que nos une ”
¿Ha sido adecuado excluir a Vox?
Ha sido una decisión. Lo importante es saber para qué son esas reuniones. Son para poner encima de la mesa las cuestiones que el país necesita para la próxima década, para ver qué retos tiene este país para garantizar su bienestar en el futuro. Y para que una sociedad tenga bienestar en el futuro, hacen falta unos cimientos sólidos basado en un respeto a una cultura democrática. Por tanto, ha sido una decisión basada en esos argumentos.
Todos los discursos hablan de mano tendida. ¿Se concretarán?
Nosotros somos un gobierno que queremos acertar. Estamos seguros de que si contrastamos nuestras propuestas y las enriquecemos con las aportaciones que nos hagan otras instituciones, agentes de la sociedad civil organizada, ciudadanas y ciudadanos particulares, los partidos políticos… vamos a acertar más. Y queremos acertar. Entonces no es una frase hecha. Es un estilo que se nos ha pedido que apliquemos. El lehendakari nos dice que miremos a las personas a los ojos y que pisemos tierra, que estemos en la calle, que no escuchemos solamente a las personas que nos dicen las cosas que nos gusta. Y esa petición es la materialización de la mano tendida en la acción cotidiana.
Como gran prioridad, un pacto de país por la sanidad. ¿Será posible?
Ahí se verá la altura de miras de cada cual para construir un proyecto para este país. En la ronda con los partidos el lehendakari ha hablado y hablará de este pacto sanitario y serán también los partidos con sus propuestas a la propuesta que el lehendakari les lleva. A nosotros nos toca ser responsables de lo que hacemos. Nos toca buscar acuerdos, plasmar propuestas en todos los ámbitos, y el sanitario es uno más. El lehendakari lo ha marcado como prioritario.
“ El lehendakari nos dice que miremos a las personas a los ojos y que pisemos tierra, que estemos en la calle ”
Son conscientes de que la Sanidad es un asunto nuclear para la ciudadanía.
Desde luego. En todas las intervenciones públicas que del lehendakari ha hecho referencia al pacto sanitario y en la ronda de contactos con los partidos expresamente dijo que lo iba a poner encima de la mesa.
Acaban de presentar las líneas básicas de los presupuestos. ¿Cómo los definiría?
Hay dos ideas. Por un lado, que tratan de garantizar el bienestar de la sociedad vasca. Por otro, son unos presupuestos que tratan de garantizar el crecimiento económico; por tanto, habrá inversiones estratégicas. Vamos a ajustarnos con rigor a la realidad que nos encontremos.
Una de las voluntades expresadas por el lehendakari es que se culmine la elaboración del nuevo estatus. ¿Será posible?
Bueno, lo tenemos en el pacto de gobierno y, por tanto, vamos a trabajar para hacerlo posible. No tengo la bola de cristal pero vamos a trabajar para que sea posible.
Desde el PSE se insiste en que no tiene que ser el gran eje de la legislatura. ¿Habrá fricciones?
Está en el acuerdo entre los partidos y, por lo tanto, vamos a trabajar para que sea una realidad.
“ No renunciamos a ninguna de las competencias que están pendientes de transferir ”
En paralelo, hay que seguir negociando lo que queda pendiente. ¿Ve voluntad en el Gobierno español?
Está por un lado el cumplimiento íntegro del Estatuto de Gernika y, por otro, el nuevo pacto estatutario. Esto no quiere decir que sea lo único. Tenemos diversas agendas para el país, y esto significa que los tenemos que ejecutar.
Pero la voluntad del Gobierno español ha ido en función de sus necesidades. La cuestión es dejar claro que no se renuncia a nada.
No renunciamos a ninguna de las competencias que están pendientes de transferir y tampoco a cumplir el programa que nos hemos comprometido a cumplir ambos partidos que gobernamos para estos cuatro años.
Para que el calendario se cumpla, será necesario que la legislatura de Sánchez dure… Y su equilibrio es inestable.
Es verdad. Pero la habilidad de los gobiernos es saber navegar en la incertidumbre. Y la habilidad de este del que yo formo parte ahora es saber que estamos en un contexto de incertidumbre. Y la gestionaremos. Yo soy muy optimista respecto a las ganas, a la fuerza y la ilusión que tiene este gobierno por sacar a este país adelante.
Está bien el optimismo, pero la realidad es que la política española nos arrastra más de lo que nos hubiéramos imaginado.
Hay un contexto en que pudiera llevarnos a que nos arrastrara, pero también creo que Euskadi es una isla. En Euskadi la política trata de buscar el bien común y no el descrédito. Debemos fijarnos en lo que nos une y no en lo que nos separa.